Los precios de la soja cerraron en baja ayer por segunda rueda consecutiva en la Bolsa de Chicago y acentuaron así su caída semanal, que resultó del 2,5 por ciento. Al igual que en la jornada precedente, los principales fundamentos de la tónica bajista fueron el avance de la cosecha récord en Brasil y la previsión de un importante crecimiento de la superficie destinada a la oleaginosa en la campaña 2017/2018 de los Estados Unidos.

Al termino de los negocios, las pizarras de la plaza externa mostraron quitas de US$ 4,14 y de 4,23 sobre los contratos marzo y mayo de la soja, cuyos ajustes fueron de 379,38 y de 383,33 dólares por tonelada. En el balance de la semana estas posiciones resignaron un 2,50% frente a los precios vigentes el viernes anterior, de 389,12 y de 393,16 dólares.

Las bajas también comprendieron al aceite de soja, que ayer perdió US$ 13,89 al cerrar con un valor de 725,09 dólares por tonelada. En la semana el retroceso fue del 4,97% respecto de los 763,01 dólares del viernes precedente. La persistente caída de las cotizaciones del aceite de palma en Malasia y el incierto rumbo que asumirá la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos en cuanto a la promoción de los agrocombustibles fueron los fundamentos de la tendencia bajista.

Acerca de Brasil, ayer el Instituto Mato Grossense de Economía Agropecuaria advirtió cierta desaceleración de la cosecha de soja en el principal Estado productor de soja brasileña, por efecto de las lluvias. En la semana la recolección progresó poco más de 6 puntos, al pasar del 45,79 al 51,94%. Dado el anticipo con que comenzaron las labores, el actual avance supera por amplio margen el 39,38% vigente un año atrás.

El hecho de que tanto el real como el peso se devaluaran ayer por segunda jornada consecutiva también sumó a la tónica bajista de las cotizaciones de la soja en Chicago, porque implica que la mercadería sudamericana comienza a resultar más atractiva para los compradores globales.

Y acerca del ciclo 2017/2018, el jueves el USDA brindará sus primeras valoraciones productivas para los Estados Unidos, en su Foro Anual. La actual relación de precios entre la soja y el maíz resulta muy favorable a la oleaginosa, por lo que el mercado da por descontado el incremento de la superficie destinada a la soja, en detrimento del cereal.

La cuestión será qué dimensión tendrá ese crecimiento. Y si bien la mayoría de los privados ubicó sus cifras entre 35,24 y 35,64 millones de hectáreas, algunos no descartan que la intención de siembra supere los 36 millones. Pero seguramente para amortiguar el impacto de ese crecimiento, los operadores prevén que el organismo proyecte un rinde promedio en torno de los 32,30 quintales por hectárea, frente a los 35,03 del ciclo 2016/2017.

Por último, cabe añadir que ayer los fondos de inversión especuladores actuaron como firmes vendedores de contratos en Chicago (soja, maíz, trigo y subproductos), en la previa del fin de semana largo en los Estados Unidos, donde pasado mañana se celebrará el Día del Presidente.

Mercado local

En la plaza doméstica, las fábricas ofrecieron ayer $ 4150 por tonelada de soja con entrega en las terminales del Gran Rosario, sin cambios respecto del jueves. No obstante, en el balance de la semana el valor de la oleaginosa retrocedió un 3,5% frente a los $ 4300 vigentes el viernes anterior. Sólo en negocios por lotes importantes algunos compradores elevaron su propuesta hasta los 4200 pesos. Según la plataforma Siogranos, del Ministerio de Agroindustria de la Nación, hasta las 21 el volumen comercializado fue de 36.760 toneladas, el más bajo de la semana.

La soja de la próxima cosecha reflejó ayer más cabalmente el retroceso externo de los precios. En efecto, la mercadería con entrega en mayo se negoció a US$ 260 por tonelada para el Gran Rosario, con una merma de 5 dólares. En el balance de la semana, el valor de la oleaginosa 2016/2017 cayó un 3% frente a los 268 dólares vigentes el viernes precedente.

En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), las posiciones mayo y julio de la soja resignaron US$ 2,80 y 2,40, mientras que sus ajustes fueron de 264 y de 269 dólares.

Maíz y trigo

El maíz estadounidense bajó ayer por segunda rueda consecutiva en Chicago, en buena medida por la tensión vigente entre los Estados Unidos y México, sobre todo luego que funcionarios mexicanos anunciaron su viaje a América del Sur en busca de nuevos proveedores de maíz y de soja, entre otros productos que normalmente son adquiridos en EE.UU.

En ese marco, las pizarras de Chicago mostraron ayer quitas de US$ 2,07 y de 2,16 sobre las posiciones marzo y mayo del maíz, cuyos ajustes resultaron de 144,97 y de 147,83 dólares por tonelada. En el balance de la semana estos contratos resignaron un 1,67 y un 1,70% frente a los valores vigentes el viernes anterior, de 147,43 y de 150,39 dólares.

En la previa del Foro Anual del USDA, los operadores prevén la intención de siembra de maíz estadounidense entre 36,45 y 36,86 millones de hectáreas, por debajo de los 38,07 millones del ciclo 2016/2017.

Por maíz argentino ayer los exportadores ofrecieron $ 2400 por tonelada para el Gran Rosario y para Necochea, sin cambios. Para Bahía Blanca pagaron 2450 pesos, 100 menos que anteayer, cuando una necesidad concreta de un comprador elevó el precio. Según Siogranos, durante la jornada sólo se negociaron 17.445 toneladas del cereal.

El maíz de la nueva cosecha, con entrega en marzo, se cotizó entre 155 y 160 dólares, mientras que la mercadería para abril osciló de 150 a 155 dólares. En el Matba, la posición abril bajó US$ 0,50 y cerró en US$ 156.

Por trigo la exportación pagó $ 2600 para Rosario y para Necochea, $ 50 más que anteayer, y $ 2550 para Bahía Blanca, sin cambios. Los molinos ofrecieron de $ 2300 a 2950.