Si bien es habitual que durante los feriados estadounidenses -EE.UU. celebró el Día de la Independencia- baje notablemente el ritmo de los negocios en el mercado de granos local, dada la ausencia de la referencia diaria de las pizarras de la Bolsa de Chicago, hoy la plaza fue un centro de catarsis para muchos vendedores, que reclamaron con poco éxito un piso de 4000 pesos por tonelada para la soja. En efecto, según lo informó la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) en su reporte de la rueda, el grueso de los compradores volvió a ofrecer $ 3900 por tonelada de la oleaginosa, un valor que fue equivalente a 231,73 dólares por tonelada.

"Hay mucha oferta retenida en niveles de 4000/4050 pesos, que debería ser cristalinos hoy en el mercado luego de las fuertes subas externas registradas entre la semana pasada y la rueda del lunes, y en medio de un proceso devaluatorio del peso importante", dijo a LA NACION una fuente del sector comercial. Añadió que los $ 4000 se alcanzan, pero sólo en operaciones muy puntuales, por lotes grandes y "casi en secreto".

Entre el cierre del viernes 23 del mes pasado y el cierre de ayer, el precio de la soja en la Bolsa de Chicago trepó un 6,7%, al pasar de 332,35 a 354,49 dólares por tonelada. También del 6,7% es la devaluación del peso frente al dólar registrada en los últimos doce días hábiles, al variar la paridad de 15,778 a 16,830 pesos, según el tipo de cambio comprador del Banco Nación (cotización divisa), que es el utilizado en al ámbito comercial agrícola.

Otro dato que hoy está fundamentando la posición de los vendedores y su reclamo de "un piso de $ 4000" para su soja es la mejora en los márgenes de la molienda. En efecto, hasta no hace muchas jornadas, la capacidad de pago de la industria aceitera exportadora medida por la BCR oscilaba entre 3650 y 3800 pesos, pero hoy fue calculada por la entidad en 4002 pesos por tonelada.

El clima de calma que se vivió en el mercado local durante las últimas dos semanas, en parte por las complicaciones logísticas derivadas del conflicto gremial en las terminales del Gran Rosario (se acumuló mercadería que restringió la capacidad de almacenaje), pero también por la necesidad de los compradores de cerrar márgenes y de fijarle un valor de entre 3650 y 3750 pesos a buena parte de la soja cuyas fijaciones vencían a fines del mes pasado, se reflejaron hoy en un recrudecimiento de la demora en la comercialización de la oleaginosa de la campaña 2016/2017, que desde fines de mayo había comenzado a normalizarse.

Según el reporte semanal de compras y embarques de la Dirección de Mercados Agrícolas del Ministerio de Agroindustria de la Nación al 28 junio, entre la exportación y la industria adquirieron 25.649.100 toneladas de soja, un 11,5% por debajo de las 28.982.300 toneladas compradas un año atrás. De ese total comercializado, un 34,7%, es decir 8.893.800 toneladas, sigue sin precio, dado que fue entregado bajo la modalidad a fijar.

"Considero que si la soja abre mañana en alza en Chicago el precio acá debería alcanzar los $ 4000 por tonelada para todos, de lo contrario, va a ser otro día con muchas broncas y pocos negocios", aseguró un operador que hoy terminó su jornada más rápido de lo habitual, por la falta de acuerdo entre las partes ("no hubo mucho esfuerzo por alcanzarlo", añadió) y por la calma doméstica que suele acompañar los feriados estadounidenses.

En los puertos del Sur, donde generalmente los exportadores completan sus buques, la demanda volvió a ofrecer $ 3950 por tonelada de soja para Bahía Blanca y $ 3900 para Necochea.

En el Mercado a Término de Buenos (Matba), la posición julio de la soja se mantuvo estable, en US$ 240 por tonelada, mientras que el contrato noviembre bajó US$ 1,60 y terminó la jornada con un precio de 253,30 dólares.

Para la apertura de los negocios en la Bolsa de Chicago tras el feriado, no hubo cambios sobre el principal fundamento que le aportó firmeza a la rueda del lunes, dado que el clima se mantuvo hoy mayormente seco sobre el Medio Oeste de los Estados Unidos, donde el maíz y la soja iniciaron las etapas de polinización y de floración, que determinarán el potencial de rinde de los cultivos, cuyas cosechas se inician entre fines de septiembre y octubre.

Trigo y maíz

En el mercado local de trigo lo mejor pasó por los puertos del Sur, dado que los exportadores pagaron $ 2800 por tonelada para Necochea y $ 2750 para Bahía Blanca, $ 50 más que el lunes. Para el Gran Rosario la oferta de la demanda se mantuvo en $ 2700.

La Bolsa de Cereales de Buenos Aires informó que los molinos pagaron entre 2500 y 2950 pesos por tonelada de trigo, según calidad, procedencia y forma de pago.

El trigo de la próxima cosecha se mantuvo muy firme en Bahía Blanca, donde los interesados volvieron a proponer US$ 175 por tonelada para la mercadería con entrega entre diciembre y enero. En el Gran Rosario los compradores volvieron a diferenciar los momentos de descarga y asignaron US$ 170 para las entregas noviembre/diciembre y US$ 175 sólo para enero. Para Necochea la propuesta quedó estable en 170 dólares para el primer mes de 2018.

En el Matba, las posiciones julio y enero del trigo subieron US$ 2,50 y 1,20, mientras que sus ajustes resultaron de 170,50 y de 172,50 dólares por tonelada.

Por tonelada de maíz los exportadores volvieron a ofrecer $ 2350 por tonelada para el Gran Rosario y para Bahía Blanca, mientras que elevaron su propuesta de 2350 a 2400 pesos para las entregas inmediatas sobre Necochea.

La posición julio del maíz en el Matba subió US$ 0,50 y cerró con un ajuste de 142,50 dólares por tonelada, mientras que el contrato septiembre bajó US$ 2 y terminó la jornada con un precio de 143,50 dólares.