Tras un fin de semana que dejó lluvias favorables para los cultivos en buena parte del Medio Oeste de los Estados Unidos, la zona clave para la producción de granos gruesos, los precios del maíz cayeron ayer un 2,3% en la Bolsa de Chicago.

Al momento de fijar los ajustes de la rueda, las pizarras mostraron quitas de US$ 3,44 sobre los contratos julio y septiembre del cereal, cuyos precios fueron de 147,73 y de 150,88 dólares por tonelada. Durante la jornada, los fondos de inversión liquidaron 16.000 contratos del cereal, equivalentes a poco más de 2 millones de toneladas.

El movimiento de los especuladores llegó luego de dos ruedas consecutivas con compras importantes de contratos, por lo que el mercado lo leyó como una toma de ganancias frente a los menores riesgos derivados del clima, que para la presente semana se prevé sin temperaturas extremas y con precipitaciones dentro de los registros usuales para las zonas productoras.

Luego del cierre del mercado, el USDA ponderó ayer el 67% del maíz de EE.UU. en estado bueno/excelente, sin cambios respecto de la semana pasada, pero por debajo del 75% vigente un año atrás y del 68% previsto por el mercado

En la plaza doméstica los exportadores ofrecieron ayer $ 2150 por tonelada disponible del maíz para las terminales del Gran Rosario, sin cambios. Además, los compradores propusieron operaciones con entregas entre julio y septiembre, a cambio de 135 dólares.

Para Bahía Blanca la propuesta fue de $ 2350 y quedó $ 50 arriba del valor vigente el viernes, mientras que para Necochea la transición fue negativa, de 2250 a 2200 pesos.

En el Mercado a Término de Buenos Aires, las posiciones julio y septiembre del maíz resignaron US$ 2,50 y 2,60, mientras que sus ajustes fueron de US$ 136,50 y de 140.

Acerca de la soja, en Chicago los contratos julio y noviembre perdieron US$ 0,46 y 0,55, al terminar la jornada con ajustes de US$ 344,57 y de 348,52 por tonelada. Tras operar buena parte de la rueda en alza, los precios de la oleaginosa fueron arrastrados por los del maíz.

En su informe semanal, el USDA relevó el avance de la siembra de soja sobre el 96% del área prevista y ponderó el 67% en estado bueno/excelente, por encima del 66% del reporte anterior, pero por debajo del 68% previsto por los operadores.

En el nivel local, la soja se negoció a 3700 pesos para la zona del Gran Rosario, sin variantes. Algunos compradores pagaron hasta 3750 pesos por lotes importantes.

Para convalidar su buen momento, el trigo ayer se cotizó a $ 2700 en Necochea y a $ 2670 en Bahía Blanca, con subas de 50 y de 20 pesos. Para el Gran Rosario el cereal se mantuvo en $ 2600. Por trigo de la próxima cosecha la demanda propuso entre US$ 165 y 170 por tonelada.