Mientras los productores tamberos siguen alertando por la falta de rentabilidad y sostienen que no hay políticas lecheras para el sector, el poder de compra de estos productores muestra una mejora.

Según datos sobre las relaciones insumo-producto publicadas por la revista Márgenes Agropecuarios, especializada en temas del sector, en julio pasado el tambero necesitaba el valor de 3,9 litros de leche para comprar un litro de gasoil. Ahora requiere 3,6 litros.

En el caso del maíz, un insumo clave, con 0,73 litros se compraba un kilo del cereal. En estos momentos hay que destinar menos: 0,56 litros.

En el alimento balanceado, un tambero en julio último necesitaba 82 litros de leche para conseguir 100 kilos del alimento. Ahora lo compra con 62 litros. También mejoró el poder de compra en relación al herbicida 2,4 DB 100%. De requerirse 43 litros de leche para comprar uno del herbicida en estos momentos hacen falta 40 litros.

Inclusive, el poder de compra de la leche mejoró mientras que el poder de compra de la soja cayó afectada por la baja de los precios del grano. En soja, en julio pasado el productor con 3,57 quintales adquiría 100 litros de gasoil. Ahora requiere 3,90 quintales. Antes con 18 quintales compraba una tonelada de fosfato monoamónico. En este mes debe destinar 20 quintales.

Según el Ministerio de Agroindustria de la Nación, con información del sector industrial, en noviembre pasado el valor pagado a los tamberos se ubicó en $ 4,53 por litro, una suba intermensual del 2% o del 74% interanual. En este contexto, de acuerdo a un informe del Instituto Argentino de Profesores Universitarios de Costos (Iapuco), mejoró también la participación de los tamberos sobre el valor final al consumidor en equivalente leche. En enero pasado, la participación del productor estaba en el 21,5%, pero a octubre pasado subió al 27,7%. En tanto, la industria, que tenía un 29,1% cayó a un 25,8% de participación. El sector comercial pasó de 33,6% a 30,6%. Por su parte, la participación del Estado vía impuestos apenas se modificó: de un 15,8% en enero fue 15,9% en octubre último.

De todos modos, en el sector siguen las expresiones de disconformidad. Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) señaló varios puntos que, a su entender, no se cumplieron por parte del Gobierno. "No se cumplió con la convocatoria de discusión sistemática de la política lechera", dijo en un comunicado. "No se definieron herramientas económicas financieras acordes a la catastrófica situación climática que afectó a las principales cuencas lecheras del país", agregó en otra parte.

En tanto, la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (Carbap) indicó que "los tamberos que aún continúan en pie siguen percibiendo un precio que no alcanza a cubrir los costos". Alertó por el cierre de tambos y dijo que los funcionarios del área lechera oficial "diagnosticaron mal" la situación del sector.

Este año, el Gobierno destinó $ 1100 millones al pago de compensaciones para los tamberos. Además, giró otros $ 100 millones para quienes sufrieron contingencias climáticas.

Radiografía de la actividad

7,1 pesos

por cada $ 100 invertidos llegó a perder en Córdoba, en el ciclo 2015/2016, un modelo lechero, según un informe del Ieral, de la Fundación Mediterránea

1100 millones de pesos

fue la pérdida de capital en Córdoba, según ese informe, que consideró también un piso de $ 843 millones.