En sólo dos semanas, los precios del trigo de los Estados Unidos pasaron de la seducción por superar los 200 dólares a pelear por no caer debajo de los 180 dólares por tonelada. Con las bajas registradas ayer, que oscilaron del 1,3 al 1,5% en las Bolsas de Chicago y de Kansas, el grano fino completó el segundo segmento comercial adverso consecutivo. Lluvias imprevistas sobre Dakota del Sur y la necesidad de mantener un valor competitivo para facilitar la colocación externa del cereal estadounidense, en medio del avance de las cosechas en el hemisferio Norte, fueron los principales factores negativos para las cotizaciones.

Al momento de fijar los ajustes de la rueda, las pizarras de Chicago y de Kansas reflejaron ayer bajas de US$ 2,39 y de 2,85 sobre el contrato septiembre, cuyo valor resultó de 183,44 y de 182,25 dólares por tonelada. En el balance semanal, dicha posición resignó un 2,25 y un 3,41% frente al precio vigente el viernes anterior, de 187,67 y de 188,68 dólares, respectivamente. Sin embargo, respecto del cierre del 7 del actual, la pérdida acumulada trepa al 6,68 y al 8,66% respecto de los 196,58 y los 199,52 dólares de entonces.

El dato que aún no logró digerir el mercado estadounidense es el aumento de las existencias revelado el 12 del actual por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos en su informe mensual. En él, el organismo incrementó el stock 2016/2017 de 31,61 a 32,23 millones de toneladas y el respectivo al nuevo ciclo 2017/2018, de 25,16 a 25,53 millones, contra los 23,84 millones esperados por los operadores.

Cabe señalar que la caída de los precios podría haber sido aún mayor de no mediar la importante devaluación del dólar frente al euro, que en la semana llevó la paridad entre ambas monedas de 1,1466 a 1,1683. Este movimiento resguardó parte de la competitividad de las materias primas agrícolas estadounidenses, comprometida tras la suba de los precios derivada de las malas condiciones climáticas para los cultivos.

En el mercado doméstico los precios del trigo se mantuvieron firmes. En efecto, la exportación pagó ayer hasta $ 3000 por tonelada disponible para Necochea y para Bahía Blanca, $ 50 más que anteayer. Para el Gran Rosario la propuesta de la demanda se mantuvo sin cambios, en $ 2800.

Buena parte de la firmeza reflejada sobre los puertos del Sur de Buenos Aires tuvo que ver con la devaluación del peso frente al dólar, que llevó la paridad de 17,10 a 17,32 y que mejoró la capacidad de pago en pesos de los exportadores.

La Bolsa de Cereales de Buenos Aires informó que los molinos pagaron entre 2750 y 3150 pesos por tonelada de trigo, según calidad, procedencia y forma de pago.

Por trigo de la próxima cosecha, con entrega entre diciembre y enero, los exportadores ofrecieron 175 dólares por tonelada para todas las terminales, un valor que implicó estabilidad en el balance semanal. En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), la posición enero del grano fino bajó US$ 0,60 y terminó la rueda con un ajuste de 174,20 dólares.

Acerca de la soja, las pizarras de la Bolsa de Chicago mostraron ayer bajas de US$ 1,54 y de 1,75 sobre los contratos agosto y noviembre, cuyos ajustes fueron de 370,74 y de 375,61 dólares. Sin embargo, en el balance de la semana estas posiciones subieron un 2,02 y un 2,07% frente a los valores vigentes el viernes anterior, de 363,40 y de 367,99 dólares.

Lluvias sobre el centro de Iowa, sobre el norte de Illinois y sobre el centro-norte de Indiana fueron las responsables de las bajas vistas ayer en el mercado para los precios de la soja y del maíz. Como viene ocurriendo en las últimas semanas, lo que suceda con el clima durante el fin de semana en las zonas productoras de granos gruesos estadounidenses determinará el rumbo de las cotizaciones en la apertura del mercado, pasado mañana.

Por soja argentina disponible las fábricas ofrecieron ayer $ 4250 por tonelada para las terminales del Gran Rosario, sin cambios respecto del jueves, pero un 6,25% por encima de los $ 4000 vigentes el viernes anterior. Además, el precio resultó superior al FAS teórico para la industria aceitera, que fue calculado en $ 4130 por la Bolsa de Comercio de Rosario.

En el Matba, las posiciones noviembre y mayo bajaron US$ 1,50 y 1,40, en tanto que sus ajustes resultaron de 261,30 y de 259,50 dólares.

Respecto del maíz, los contratos septiembre y diciembre en Chicago cayeron ayer US$ 4,43 y cerraron con ajustes de US$ 149,50 y de 154,91. En el balance semanal, sin embargo, las posiciones citadas sumaron un 0,93 y un 1,02% frente a los valores vigentes el viernes anterior, de 148,12 y de 153,34 dólares.

En el nivel local, el valor del maíz se mantuvo estable, en $ 2500 para Necochea y para Bahía Blanca, y a $ 2400 para el Gran Rosario.