Es probable que los silajes de cultivos de invierno, probablemente ya se hayan hecho o estén a punto de hacerse, pero lo que es seguro es que de hacerse en estos días, serán con cultivos bastante “pasados” o bien que ya hayan formado grano, lo cuál puede ser bueno o malo de acuerdo a como se considere.

Partiendo de la base que para que un cultivo sea rentable y útil para utilizarlo como forraje conservado, es mandatorio que su digestibilidad sea alta.

A tal efecto, en el poco probable caso que el cultivo se haye en estado vegetativo, deberíamos cortar en pre floración, permitiendo que la humedad descienda al 50% y a partir de allí hacer un silaje tendiente a buscar digestibilidad y proteína.

Por la época del año en la que estamos, seguramente los cultivos están “mas pasados” osea que ya hayan formado grano y algunos estarán en estadío de grano pastosos a pastoso duro, lo cuál es excelente para su digestibilidad y utilización.

Sabiendo que quien aporta más nutrientes solubles en rumen son los granos dejaremos de la lado la idea de hacer un silo proteico para apuntar a uno energético (por el aporte del almidón en rumen) y además podremos trabajar con corte picado directo.

Con la utilización de cabezales de corte directo, asegurándonos que el cultivo tiene alrededor o sobre 40% de materia seca se puede hacer un silaje de cultivo de invierno con buen aporte energético, excelente digestibilidad y aporte de fibra también para poder cuidar un poco más las pasturas.

Para este tipo de trabajo, debemos tener en cuenta una regulación fundamental en las picadoras que es el arrime de contracuchillas para poder lograr un tamaño de picado uniforme, lo que se traducirá en un mejor llenado del silo, facilidad de compactación, mejor consumo por parte de los animales y disminución de la selección en los comederos.

Tenemos la suerte que en esta época del año se puede trabajar un poco más tranquilo por lo cual la correcta regulación en tiempo y forma de los implementos va a jugar un papel fundamental en la producción y utilización futura de este tipo de silajes, que según nuestro manejo y estrategia podrá ser utilizado como un suplemento energético o un complemento proteico, pero siempre mirando cómo debemos trabajar para aportar la máxima digestibilidad en el comedero.