Las cervezas premium buscan acercarse a los millennials y expandir su red de distribución para acceder al público masivo. Patagonia, Kunstmann y Otro Mundo son algunas de las marcas que ganan presencia en supermercados y bares.

Armin Kunstmann es el dueño de la marca que lleva su apellido y que este invierno apostó a Bariloche. La marca chilena está asociada al conglomerado de bebidas CCU, lo que le permite contar con una amplia red de distribución. Con la fábrica principal en Valdivia, Chile, y una microcervecería en Playa Bonita, producen en suelo argentino el 10% de los 5.500 hectolitros que anualmente venden en nuestro país.

Kunstmann cuenta que parte de la estrategia de expansión se apuntala en los bares cerveceros. Ya tienen tres en Chile, acaban de inaugurar uno en Bariloche y para 2019 el plan es llegar a Buenos Aires.

La empresa exporta el 5% de su producción a Uruguay, Paraguay, Colombia, Brasil y España. “Hay oportunidades de negocio para llegar a exportar el 20% de la producción”. Kunstmann detalla que en Chile el consumo de cerveza artesanal llega al 3%, mientras que en Argentina es del 1%. “En Chile hemos tenido acceso a buenas cadenas de distribución, lo que en Argentina es muy complejo para las artesanales. A través de CCU podemos estar en muchos supermercados que nos ayudan a crecer en volúmenes”.

“Siempre la variedad más pedida es la nueva. Eso es lo que buscan los millennials”, dice Kunstmann. Por eso hacen experiencias como el reciente “cocimiento colaborativo” en Bariloche, en el que convocaron a otros maestros cerveceros para crear algo nuevo. “Buscamos que el cliente tenga una experiencia con la marca, que recorra la planta, aprenda sobre la elaboración y se lleve algún recuerdo: una gorra, un delantal, un vaso”. En temporada de verano, el merchandising representa el 40% de la facturación de la planta de Valdivia.

“Nuestra apuesta es construir distribución y exportar”, explica PabloFazio, CEO y fundador de Otro Mundo Brewing Company. “Estamos presentes en casi todas las cadenas nacionales de supermercados y ahora estamos haciendo un desarrollo muy fuerte de las regionales, que tienen una cobertura interesante. Queremos seguir creciendo en los canales de proximidad”, relata.

Producen 20.000 hectolitros al año. “Tuvimos muchísimos avatares, pero desde hace tres o cuatro años venimos creciendo al 40% en volumen”. Frente a la crisis del poder adquisitivo, Fazio indica que “se siente una caída del consumo, en especial en todo lo que es gastronomía. Pero también pasa que cuando no hay plata para viajar o comer afuera, la gente se da lujos pequeños y posibles: tomarse una cerveza que le gusta o comprarse un queso”. Otro Mundo exporta el 5% de su producción a Europa, EE.UU., Hong Kong, Uruguay y Paraguay. “Uno de nuestros objetivos principales es crecer regionalmente,” cuenta.

Mariano Toledo es director general de cerveza Patagonia. Hace dos años, la marca —que pertenece al gigante global Ab Inbev— abrió un bar y una microcervecería con elaboración a la vista en Circuito Chico, Bariloche. Producen 17.000 hectolitros al mes. “En 2017 duplicamos el volumen y este año esperamos seguir consolidándonos”, indica.

Además de apoyarse en la distribución que les proporciona Ab Inbev, buscan cercanía con el consumidor mediante la apertura de “Refugios”, bares exclusivos de Patagonia, en ciudades como Buenos Aires, Córdoba, Rosario y Mendoza. “En los Refugios, las variedades de cerveza que se sirven desde las canillas son siempre una novedad,” apunta Toledo.