Todo indica que Uruguay seguirá otro año más sin poder colocar terneras Holando de entre 8 y 15 meses en China, un destino que años atrás generó una demanda importante, dinamizó la cría en los tambos y motivó que se apostara más a los registros de producción.

“Hoy no estamos vendiendo nada de ganado lechero a China porque los operadores de ese país bajaron la intensidad de las compras”, explicó a El País el operador Federico Di Santi, integrante de la firma Di Santi Romualdo.

Esa caída de la demanda, hizo que Uruguay pasara del primero al cuarto lugar como proveedor. El principal abastecedor es Australia, seguido de Nueva Zelanda y luego Chile.

La pérdida de ese primer puesto es una mezcla de caída de competitividad, de precio y de calidad, pues Uruguay hizo algunos embarques de ganado lechero que no conformaron a los importadores chinos y terminaron complicando más el negocio.

“Hoy la demanda de China no es tan alta y se ve satisfecha con los embarques que le envía Australia, por los volúmenes que puede exportar, pero también tiene a Nueva Zelanda y Chile”, reconoció Di Santi.

La empresa Di Santi Romualdo no ha podido colocar terneras y vaquilloncitas Holando en China desde enero de 2015, por más que China nunca haya dejado de comprar ganado de otros orígenes y Uruguay quedara caro para los importadores chinos haciéndolos desistir de nuevas importaciones.

El ganado tiene por destino fortalecer los mega tambos de China, un país que apunta a fortalecer su lechería, apuntando a abastecer parte de su clase media que sigue incorporando mayor volumen de proteína a la dieta mientras se va fortaleciendo económicamente.

Años atrás, algunos problemas generados con ciertas fórmulas infantiles que incluso provocaron muertes en China, generó que el gobierno del gigante asiático apostara más a fortalecer las producciones de lácteos y la demanda por terneras lechera en pie subió.

Optimismo. Di Santi es optimista. “Se volverá a abrir la ventana de exportación de ganado lechero hacia China cuando la demanda crezca más y eso haga que los precios del ganado de Australia y Nueva Zelanda o incluso de Chile, suban. Ahí Uruguay quedará un poco más atractivo” para los importadores chinos. En una palabra, hay que tener paciencia y esperar la vuelta del mercado.

Pero la tranca que se está viendo en el ingreso de ganado lechero en China no se ve en la venta de ganado de carne con destino a reproducción o incluso con destino a faena.

En este último caso las autoridades de China y Uruguay ratificaron un convenio en las últimas semanas y el mercado, a futuro, parece prometer mucho a futuro.

Di Santi Romualdo ya cargó un barco con ganado Angus que está llegando hoy a China y a finales del mes que viene estará cargando otro navío por 4.000 vientres, que serán mitad Angus y mitad Hereford.

Carne. A su vez, durante el segundo semestre del año, las autoridades sanitarias de Uruguay y China tendrán una nueva instancia de negociación, donde está en juego el nuevo protocolo para la exportación de carnes. El protocolo está avanzado y Uruguay ya contestó parte de los requisitos que está imponiendo China para las carnes y va quedando la instancia de discusión final para que sea aprobado y comience a regir.

Especialmente en carne bovina y menudencias, China es el principal importador medido en volumen, pero el protocolo vigente ya tiene varios años.