Fredy Villagómez Guzmán Sociólogo, CIPCA Nacional.- El 18 y 19 de mayo del presente se realizó el Encuentro Nacional de pequeños productores del Pacto de Unidad, convocado por la CSUTCB, CNMCIOB “BS”, Conamaq, CSCIOB, CIDOB, AOPEB y CIOEC. Después de mucha discusión y debate entre los delegados de las distintas organizaciones y representantes de los nueve departamentos, se consensuó una agenda de propuestas y demandas para fortalecer la producción agropecuaria campesina indígena, aunque muchos temas de esta agenda son ya de larga data.

Las autoridades del Estado presentaron datos globales sobre producción agropecuaria de la última década comparándolos con el período neoliberal sobre saneamiento de tierras, ampliación de la superficie cultivada, incremento de volúmenes de producción e inversión pública.

Según los datos del Ministerio de Desarrollo Rural y Tierras, producimos más de lo que consumimos, existe sobreproducción en rubros como papa, cebolla, zanahoria, tomate y frutas, solamente habría déficit en la producción de trigo y manzanas.

Las y los representantes de las organizaciones en sus intervenciones mostraron otra faceta de la problemática y situación agropecuaria de los pequeños productores, incluso algunos interpelaron a las máximas autoridades presentes indicando que esas cifras no reflejan la verdadera situación y la realidad de ese sector.

Jorge Choque, productor beniano, manifestó: “…hermanos, según los números estamos bien, bastante bien, pero es necesario centrarse un poco en la realidad, en nuestras políticas grandes no hay nada que discutir, pero las políticas que llegan al bolsillo del productor de papa, de café, de arroz y de maíz realmente hay que mejorar hermano presidente y hermano ministro”.

En el acto de clausura, el productor de Caranavi Gregory Peñafiel decía: “…vivimos 12 años de proceso de cambio, hemos visto la transformación de nuestro país, carreteras y teleféricos, pero para los pequeños productores no ha llegado el proceso de cambio”.

También se constató que al interior de las mismas organizaciones hay visiones distintas y contrapuestas sobre la problemática agropecuaria.

Unos sugieren la mecanización e incorporación de biotecnología para ampliar la producción y mejorar rendimientos y así contrarrestar el contrabando y la importación de alimentos.

Otros, quizá el sector más numeroso, apuestan por la producción agroecológica, la recuperación de suelos, la modernización de la agricultura incorporando tecnología apropiada a cada contexto, la regulación de mercados y se oponen tajantemente a la incorporación de semillas transgénicas. Probablemente por esta discrepancia el tema de los transgénicos no fue considerado en las conclusiones.