En uno de los aumentos más abruptos desde que gobierna la administración de Mauricio Macri, el Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) -que informa el Banco Central- muestra que la inflación esperada para 2018 es ahora de 27,1%, muy por encima de la meta oficial inicial que estipulaba un 15%.

De esa forma, hay un alza del 5,1% con respecto a lo esperado por estos analistas en mayo.

"En un contexto financiero más adverso que el mes pasado, tras una depreciación significativa del peso, los resultados del REM indicaron un aumento en las expectativas de inflación", marcó el Banco Central a través de un comunicado.

Con respecto a la inflación "núcleo" -es decir sin efectos como el de las tarifas-, se la estima en 25,1%, con un incremento de 5,3% con respecto a la estimación de mayo.

Para los próximos 12 meses, la inflación está proyectada en 22%, con una suba del 4% con respecto al REM previo. Recién durante el año que viene -según estos analistas- la inflación bajaría algo por debajo del 20%: será del 19%. De todas formas, también es un 4% más que lo que suponían en la medición anterior.

Los analistas estiman que hay dos trimestres de contracción económica: un 1% negativo para el que está en curso (segundo trimestre de 2018), y 0,4% de recesión en el tercer trimestre.

La mayor inflación también supone una desaceleración del crecimiento. La expansión del PBI para 2018 sería de 1,3%, lo que significa una rebaja del 1,2% con respecto al relevamiento anterior (la estimaban en 2,5%). La expansión en 2019 será de 2,2% (también un 1% menos que en la medición de noviembre). Recién en 2020 habría un crecimiento algo más seductor, del 2,8%.