Los industriales argentinos son optimistas en Shanghai. Crece la demanda china, que podría ser la puerta de acceso a otros mercados de Oriente -incluso, se dio el primer paso en Japón-, y el valor del dólar favorece las exportaciones. No obstante, reconocen que por los problemas políticos que atentaron contra la rentabilidad de sector, la industria frigorífica estuvo casi una década con déficit de inversiones.

Ahora es el momento de crecer, sentencian a coro los exportadores, y no descartan que se vaya a ajustar el precio del ganado ante el nuevo escenario. Pese a ello, el gran interrogante es si el país va a contar con la hacienda suficiente como para enfrentar los nuevos desafíos.

Entre bife y bife, en la Sial China 2018 aseguran que es la hora de dar un salto de trascendencia en el mercado chino que, lejos de contentarse con el garrón y el brazuelo de los últimos años, comienza a demandar cortes de calidad. “Ya estamos trabajando en eso”, aseguró Mario Ravettino, presidente del Consorcio ABC y vicepresidente del Ipcva, en el pabellón del “Argentine Beef”.

En el marco de una nueva misión comercial, 16 miembros del Consorcio de Exportadores de Carnes Argentinas ABC participaron de la SIAL Shanghai, una de las ferias de alimentos más importante del mundo. Arrebeef S.A, Azul Natural Beef, Black Bambu, Compañía Bernal S.A, Ecocarnes S.A., Friar S.A., Frigolar S.A, Frimsa, Frigorífico Gorina, La Anónima S.A de la Patagonia, Logros S.A, Marfrig, Offal, Rafaela Alimentos S.A., Rioplatense y Swift formaron parte del Pabellón Argentine Beef, donde buscaron nuevos beneficios económicos, ampliaron la cartera de clientes y negociaron personalmente con los importadores actuales del país oriental.

Los empresarios argentinos reconocen la importancia de esta exposición como una puerta de entrada a uno de los mercados más relevantes para la industria cárnica. Al respecto, Ravettino expresó: “China es hoy el primer importador mundial de carnes bovinas y es un mercado que parece no tener techo en términos cuantitativos y cualitativos. Constituye más de la mitad del volumen total exportado por Argentina”.

“Hay que hacer un upgrade desde el conocimiento para posicionar a la carne argentina como un producto de alta calidad”, destacó Carlos Riusech, del frigorífico Gorina. En su visión, es un destino con precios estables y un flujo constante, lo que demuestra la gran potencialidad del mercado, que casi que no tiene estacionalidad.

“Los importadores comienzan a pedir cortes más finos”, agregó Mariano Grimaldi, del frigorífico Logros, quien asegura que ya vende cortes Hilton en China, aunque en pequeñas cantidades.

“Si hay hacienda suficiente nos va a ir muy bien, y a los productores también”, agregó Hugo Borrel, de Arrebeef. Y concluyó: “Más mercado y más exportaciones redundarán en más trabajo y mejores precios para toda la cadena”.