Por el tortuoso camino de tierra que va hacia el sudeste de la provincia de Salta, durante muchas horas solo se ve un campo natural con monte degradado por el sobrepastoreo, aprovechado esporádicamente por cabras y hacienda criolla.

De pronto, como en un oasis, aparece campo limpio con cultivos de maíz y de soja con riego subterráneo por goteo, que alcanzan rindes semejantes a los de la región pampeana. También, hacienda Braford que desarrolla sobre pasturas de alta producción de gatton panic y grama rhodes.

Llegamos a Los Pozos, una empresa de Cresud, que desarrolla campos en la zona con gran esfuerzo económico y humano, buscando transformar la realidad productiva y social de la región.

La empresa tiene 240.000 hectáreas propias y está ubicada en el departamento de Rivadavia, al sudeste de la provincia de Salta. Está cerca de la localidad Joaquín V. González, en el departamento de Anta, y del límite con el Chaco, a 350 kilómetros de la ciudad capital. Fue adquirida por Cresud en 1995.

El clima de la zona es subtropical con estación seca (otoño-invierno) y húmeda (primavera-verano), con lluvias que varían de 600 a 700 mm según años, con 628 de promedio de los últimos. La temperatura media anual se ubica alrededor de los 20 grados y las heladas ocho como promedio anual pueden ocurrir de mayo a septiembre. La biomasa original es bosque y monte.

En los suelos del campo se observa heterogeneidad, con predominio de los de clase III y IV sobre los VII y VIII. Están muy bien provistos de fósforo (los valores frecuentes son 60 ppm) y de nitrógeno (de 35 a 70 ppm).

Los Pozos lleva a cabo un desarrollo de tierras con un criterio conservacionista respetando las leyes vigentes y las habilitaciones otorgadas por el gobierno provincial, con todos los estudios de impacto ambiental exigidos. Cada lote desarrollado cuenta con reservas y cortinas de monte que permiten conservar la flora y fauna autóctonas de la región.

Previamente, se realiza un estudio de suelos a escala, en el que se establecen las series, fases y asociaciones presentes en cada lote. El mapa de suelos permite identificar si un potrero tiene aptitud agrícola o ganadera y determina el tipo de trabajo a realizar. En los de aptitud agrícola, la prioridad es mejorar la retención hídrica a través de la siembra directa y del incremento de materia orgánica. Para eso se siembran, en etapas tempranas, cultivos como el maíz, con el fin de evitar la erosión del suelo. En los lotes ganaderos, se siembran pasturas megatérmicas de gatton panic y grama rhodes que constituyen un recurso forrajero de producción abundante y de buena calidad.

Ganadería

De las 240.000 hectáreas de Los Pozos, 42.000 se destinan a ganadería de ciclo completo. "El sistema ganadero de Los Pozos tiene como vigas maestras al gatton panic y al silaje de autoconsumo. Con esa dieta desarrollamos un ciclo completo que produce novillos para exportación", dijo Tomás Cavanagh, gerente de campo de Los Pozos.

El servicio natural de vacas va desde enero a marzo y la parición es en octubre, noviembre y diciembre. A su vez, el servicio de vaquillonas es a los 20 meses (con 340-360 kilos), en julio, agosto y septiembre, con inseminación artificial a tiempo fijo más repaso posterior con toros. La parición ocurre en abril, mayo y junio, con destete en octubre y noviembre. La carga animal varía según sectores del campo, pero fluctúa alrededor de una vaca por hectárea.

El sistema de recría es innovador para la zona del NOA. El destete se realiza con 160-180 kilos. En una primera etapa se recría la "cabeza" y el "cuerpo" (aproximadamente el 70% de los terneros y terneras) mediante encierre a corral con silaje de autoconsumo y semilla de algodón como fuente proteica. Esta modalidad se desarrolla durante la época invernal seca.

El 30% restante (la "cola" del destete) también se recría en corrales de encierre, pero con dietas más concentradas, con base de silo de sorgo y semilla de algodón adicionando poroto de soja, maíz partido y núcleo vitamínico-mineral. Con esta ración, los terneros "cola" ganan más peso y se equiparan con los de "cabeza" y "cuerpo" al fin del encierre.

El engorde es del orden de 400 gramos por día durante el autoconsumo de silaje en el período invernal y de 600 gramos por día en la etapa pastoril.

En el verano, con el comienzo de las lluvias y la consiguiente producción abundante de pasto de calidad, estos animales con 270-280 kg se envían al campo. Allí se desarrolla un sistema de pastoreo rotativo intensivo de alta carga, con el fin de aprovechar al máximo la alta tasa de crecimiento y conversión en carne del gatton panic, además de procurar el control del renoval. A partir del mes de abril se comienzan a enviar los primeros novillos a la etapa de terminación, con pesos de 360-380 kilos.

Los novillos se terminan con alimentación en corrales de encierre, debido a que esta fase se realiza en una época seca de baja producción y calidad del pasto. Los animales que se envían a faena en frigoríficos de la zona tienen en promedio 24 meses de edad, un peso de 460-490 kilos y se destinan a exportación. Los insumos utilizados en el corral son silajes de maíz y sorgo, maíz partido y poroto de soja que se producen en el mismo establecimiento y permiten darle valor agregado a la producción agrícola.

Con rotación y riego por goteo

SALTA.- En los suelos de mayor calidad de Los Pozos se desarrollan principalmente cultivos de maíz y soja en rotación. El sistema productivo del cereal incluye barbechos largos para pasar la época seca, acumular humedad y llegar al momento de siembra con los lotes limpios controlando las malezas resistentes a herbicidas.

Se emplean híbridos con buen equilibrio entre productividad y estabilidad, siembra directa con máquinas neumáticas de contratistas, densidades de siembra del orden de las 44.000 plantas por hectárea y pulverización selectiva para control de malezas. No hace falta fertilizar porque los suelos nuevos están muy bien provistos de fósforo y de nitrógeno.

Una proporción de la superficie sembrada se destina a la confección de silo para ser usado por la ganadería.

Últimamente se están haciendo experiencias con riego subterráneo por goteo, con el cual se han alcanzado rendimientos del orden de los 10.000 kilos de maíz por hectárea en 189 hectáreas utilizando mayores densidades de siembra y fertilizantes.

El sistema está compuesto por mangueras que recorren todo el potrero con una separación de 90 centímetros entre si y difusores cada 50 centímetros. Están enterradas 20 centímetros para no entorpecer las labores de implantación del cultivo. El sistema permite hacer fertirrigación y asegura una altísima eficiencia en el uso del agua, al no generar pérdidas por evaporación ni por escorrentía. Cada difusor permite distribuir un caudal aproximado de un litro por hora.

La soja se siembra a partir del 15 de diciembre con una densidad de alrededor de 270.000 plantas por hectárea, bien protegida durante el ciclo del cultivo con insecticidas y fungicidas. Por ahora la zona está libre del temible picudo negro, lo cual permitirá alcanzar rindes del orden de los 28 qq/ha en esta campaña, frente a un rinde de indiferencia de 14qq/ha. De la producción total, 2000 toneladas son empleadas en el feedlot de la empresa, que también requiere 15.000 toneladas de maíz.

Un proyecto a largo plazo

Cambio de valor

Cresud, propietaria de Los Pozos, es una compañía agropecuaria que compra y desarrolla tierras para agregarle valor y luego venderlas. El proceso supone la transformación de superficies improductivas en ganaderas o agrícolas tomando como base la aptitud de los suelos y las posibilidades comerciales.

Escala

En la Argentina, Cresud trabaja 550.000 hectáreas en 13 campos con producciones agrícolas y ganaderas. Si se suman los emprendimientos en Brasil, Paraguay y Bolivia, se llega a 840.000 hectáreas. Cotiza en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires y en el Nasdaq de Estados Unidos.

Superficie

De las 240.000 hectáreas de Los Pozos, 42.000 se destinan a ganadería, 18.000 a agricultura, 10.800 están en desarrollo y el resto mantiene su condición natural. El campo está dividido en módulos, que a su vez incluyen lotes que se van habilitando gradualmente.

Precisión y rapidez

Las lluvias estivales de la zona de exigen precisión y rapidez en las labores de implantación de maíz y soja para no perder ni un milímetro. En el campo tienen organizados "golpes de siembra" de 1500-1700 ha por día con contratistas, para aprovechar los chaparrones de diciembre y enero.

Criterio social

En Los Pozos trabajan 98 personas, que viven en el establecimiento con sus familias. Es por eso que se está desarrollando un polo urbanístico dentro del campo para satisfacer las necesidades de todos. Ya está construida una escuela y un consultorio de atención médica.

Por: Carlos Marin Moreno