La reunión de la Mesa de Carnes con Mauricio Macri, que se llevó a cabo hace seis semanas atrás, hizo hincapié en dos temas fundamentales para el sector de ganados y carnes. Por un lado, se habló acerca del achicamiento a 50% de los aranceles de exportación de cueros frescos y salados en los próximos dos años. Aunque esta reducción es sólo simbólica, no se puede pasar por alto que es la primera vez desde 1983 que un Presidente le presta atención al tema y comprende que los sectores productores y de la industria frigorífica no pueden sostener al sector curtidor resignando su propia rentabilidad.

Por otra parte, también se platicó sobre el pago a cuenta por parte de los usuarios de faena de la alícuota de IIBB, la cual le corresponde al último eslabón de la cadena, es decir al carnicero. Cabe destacar, que CICCRA considera que esta medida es fundamental para el blanqueo de la cadena industrial. Aún así, el proyecto aprobado por el Presidente ha encontrado fuerte resistencia en la provincia de Buenos Aires y, por lo tanto, no se llevaría adelante. Este inconveniente genera mucha preocupación, porque existe la posibilidad de que los dos temas charlados terminen malográndose por culpa de la renuencia de las burocracias estatales para ponerlas en práctica.

Dejando a un lado el análisis de la reunión, CICCRA revela datos sobre el mes de abril e informa que este año, la faena de hacienda vacuna se ubicó en 948,3 mil cabezas y resultó 2,4% mayor a la de abril del año pasado. Sin embargo, cuando se corrige la serie por la cantidad de días hábiles (en abril de 2018 hubo un día hábil más que en abril de 2017), se observa que la faena vacuna disminuyó 3% en términos anuales.

A su vez, explica que en abril se amplió nuevamente la participación de las hembras en la faena total, llegando a 46% (+4,1 puntos porcentuales en relación a un año atrás). Mostrando, seguramente, los efectos de la sequía que obligó a los productores a aliviar sus campos, adelantando los tactos y sacando los vientres vacíos.

Otra información que debemos tener en cuenta, es que en el primer cuatrimestre del año, 346 establecimientos faenaron 4,18 millones de cabezas de hacienda vacuna. En relación al primer cuatrimestre de 2017 la actividad frigorífica vacuna aumentó 5,0%. Los diez establecimientos con mayor nivel de actividad explicaron 19,1% de la faena total registrada en enero-abril de 2018. En tanto, los 40 establecimientos que más cabezas sacrificaron, concentraron 51,0% de la faena total.

En lo que respecta a la participación de las hembras en la faena total, en enero-abril del corriente año se ubicó en 44,9%. Límite superior para entrar en fase de liquidación de vientres. Este guarismo resultó 2,7 puntos porcentuales superior al correspondiente a enero-abril de 2017. A su vez, en abril se produjeron 215 mil toneladas res con hueso (tn r/c/h) de carne vacuna. Esto significó una suba de 3,5% interanual, que corregida por días hábiles se transformó en una caída de 2,0% anual. En tanto, cuando se considera el período enero-abril del corriente año, la producción de carne vacuna se ubicó 6,2% por encima del volumen producido en el primer cuatrimestre del año pasado

No olvidemos, que en lo que va del año, el mercado interno absorbió 809,4 mil tn r/c/h de carne vacuna, es decir un volumen similar al de enero-abril de 2017. Esto implica que todo el crecimiento de la producción fue absorbido por los mercados externos. De esta manera, se observó una nueva retracción del mercado interno respecto de la producción total (cuarto año consecutivo), de 90,8% en el primer cuatrimestre del año pasado a 85,3% en igual período de 2018. A la inversa, la participación de las exportaciones subió hasta 14,7%.

En cuanto al consumo per cápita de carne vacuna se ubicó en 57,8 kg/año en abril de 2018, considerando el promedio móvil de los últimos 12 meses. En términos interanuales este guarismo verificó una suba de 3,3%. Sin embargo, cuando se toma el promedio del primer cuatrimestre del año, el consumo per cápita fue de 54,6 kg/hab/año y resultó 1,3% menor al de un año atrás.

En los primeros tres meses de 2018 las exportaciones de carne vacuna continuaron creciendo a un ritmo muy elevado, tal como viene sucediendo desde el inicio de la primavera de 2016. Es importante resaltar que en lo que va del año la expansión se explicó por el aumento del volumen exportado.

En marzo de 2018 se exportaron 26.800 toneladas peso producto (tn pp) de carne vacuna, volumen que resultó 53,3% superior al registrado en marzo de 2017. En enero habían exhibido un crecimiento de 93,4% y en febrero habían hecho lo propio en 70,4%. De esta manera, en el primer trimestre del año el volumen de carne vacuna vendido en el exterior creció 69,9% con relación a enero-marzo de 2017. Por otra parte, un detalle importante es que los embarques de carne vacuna fueron los más elevados de los últimos nueve años.

Por último, el informe de CICCRA hace referencia a las exportaciones de carne vacuna expresadas en toneladas res con hueso (tn r/c/h), y detalla que equivalieron a 38.641 tn en marzo del corriente año y alcanzaron un total de 103.975 tn en el primer trimestre de 2018. Comparadas con iguales períodos de 2017, las tasas de crecimiento fueron de 48,0% y 67,3%, respectivamente.