Un nuevo informe sobre el bioetanol, elaborado por Claudio Molina y Emiliano Huergo, nos enfoca en tiempo y línea sobre la situación que está viviendo dicho combustible. Uno de los titulares que resaltan es el siguiente: "Fijan nuevos precios para el bioetanol a partir de abril". Esta noticia que fue publicada en Ámbito Financiero, el 28 de marzo de este año, detalla que Juan José Aranguren  estableció que el biocombustible que se produce a partir de caña de azúcar iba a tener un aumento del 7,5% en marzo, y otro de 3,54% para abril. De esta manera, no caben dudas que las noticias que publica el informe no son tal alentadoras.  

Por otra parte, también hacen hincapié en una noticia publicada por El Economista. Allí, el medio digital titula la información de la siguiente manera: " Suben los precios del etanol y podría impactar en las naftas al consumidor". Allí, explican que el aumento decretado anteriormente por el Gobierno, termina repercutiendo en otros sectores. Ya que con los cambios, la noticia publica el 28 de marzo, detalla que "el precio del etanol de maíz comercializado en Argentina será de 12,19 pesos por litro hasta el sábado y de 13,16 pesos por litro a partir de abril".

A consecuencia de esto, la resolución ministerial explicó que el cambio en el precio del etanol hecho con caña de azúcar también obedeció a una modificación en los resultados de la ecuación con la que se establece el valor del producto. En Argentina, las gasolinas poseen un porcentaje de mezcla obligatorio de etanol de un 12 por ciento, por lo que la medida impactaría en los precios de los combustibles en momentos en que el Gobierno lucha por contener una inflación cercana al 15 por ciento que prevé para 2018.

El 5 de abril, diferentes medios informaron: "Aumenta 5 por ciento promedio el precio de las naftas y el gasoil". Atrás había quedado aquella posibilidad de que se elevara el importe, ahora se había convertido en algo serio y verdadero. El cuerpo de la nota, publicada por el portal Surtidores, explicaba que tras la reciente suba de los biocombustibles y el nuevo valor
alcanzado por la cotización internacional del crudo liviano, las empresas petroleras decidieron
ajustar las pizarras de sus Estaciones de Servicio tras dos meses sin cambios.

Claramente, en nuestro país no le estaba yendo nada bien al biocombustible. Y como si fuera poco, también protagonizó varias noticias que dieron mucho de qué hablar internacionalmente. "Biodiesel: Estados Unidos raticó el bloqueo de su mercado por cinco años", titulaba El Cronista. La Para desgracia de muchos, la Comisión de Comercio Internacional estadounidense (ITC, por sus siglas en inglés) había completado aquel 4 de abril, su dictamen en contra del biodiesel argentino, y también de Indonesia, al remarcar que la importación de ese producto perjudicó a los productores norteamericanos.

A su vez, el 5 de abril, Clarín informaba: "La industria del biodiésel rechazó los aranceles del 140% fijados por Donald Tump". El cuerpo de la noticia, detallaba que la Cámara de Biocombustibles (CARBIO) había rechazado, por "injustificada e ilegal", la ratificación de Estados Unidos de los aranceles antidumping contra el biodiésel argentino, que, "al sumarse a aranceles simultáneos por presunto subsidio, generan una barrera del 140%, que bloquea las exportaciones del biocombustible a aquel país".

Sin lugar a dudas, la situación del biocombustible va de mal en peor. No sólo tiene complicaciones en nuestro país, sino también barreras que lo perjudican a nivel internacional. Aún así, recién estamos transitando el cuarto mes del 2018, ¿se podría decir que existen posibilidades de qué la situación mejore en lo que resta del año?