Según el informe difundido por la entidad, en toda el área se observan lotes manchoneados con plantas cloróticas y necróticas, e incluso muertas. en le mismo, explican que en estos manchones “se produce un secado abrupto de las plantas, que permanecen con los pecíolos y las hojas adheridas, pendientes.

En los cultivos próximos a madurez, se forman pequeñas esferas negras (microesclerocios) en el interior de los tallos, principalmente en su porción basal. En casos severos, los tejidos internos del tallo pueden presentar una coloración grisácea debido a la gran cantidad de microesclerocios. Estos producen una obstrucción vascular en el tallo, que explica el marchitamiento y muerte de las plantas”.

Además, explican que los síntomas y signos observados corresponden a la enfermedad Podredumbre Carbonosa (Macrophomina phaseolina), que es propia de ambientes estresantes y suelos compactados. En esta campaña se está observando con alta prevalencia, y el patógeno que la causa ha sido aislado desde plantas sintomáticas obtenidas en Oliveros, Timbúes, Maciel, Totoras, Los Nogales y Peyrano.

Por otra parte, también se advierte una alta presencia de cancro de tallo (Diaporthe phaseolorum), que estaría afectando muchos cultivos. A nivel de campo, se han observado síntomas compatibles con ambos tipos de cancro (D. p. var caulivora Syn D. caulivora y D. p. var meridionalis Syn D. aspalathi), por lo que ambas especies podrían estar presentes. Una particularidad de esta campaña, es que al abrir plantas aparentemente sanas, o con cancros incipientes, se encuentra la médula totalmente tomada, con la típica coloración herrumbre.

Durante la gira técnica de recorrida de ensayos de la Red INTA Santa Fe sur, realizada a principios de marzo, tanto el Cancro del tallo como la Podredumbre Carbonosa se observaron en los 4 sitios visitados (Carmen de Sauce, San Jerónimo, Totoras y Oliveros). La evaluación visual preliminar sobre 30 cultivares de soja de primera de esta Red, sugiere que estas enfermedades afectaron a todas las variedades, aunque con diferente intensidad según el sitio y el cultivar.