La edición 23° de la Expoactiva fue visitada por más de 25.000 personas. La preocupación por el clima y el desánimo por la falta de rentabilidad, no fue impedimento para que la familia de los productores se volcara a conocer las innovaciones en cada uno de los sectores.

Además, éste año por el espacio que tuvo el grupo de autoconvocados y que hizo que el Ministerio de Turismo retirara la declaración de interés, la inauguración de la Expoactiva vino precedida por la polémica.

“Había mucho ruido, desinformación y también mucho mal entendido. Por suerte todo eso se aclaró, sirvió para difundir más la muestra, explicar de qué trataba y eso hizo que la gente acompañara mucho más.

Quedamos muy conformes” expresó a El País, Jorge Andrés Rodríguez, vicepresidente de la Asociación Rural de Soriano.

Con la masiva concurrencia del sábado, el número de visitante quedó estimado entre 25.000 y 30.000 personas. “Son días de intenso calor, la muestra es grande y es difícil caminarla toda entre las 12:00 y las 3:00 de la tarde. Hubiéramos preferido que fuera con mucho barro, que hubiera llovido porque realmente el agua se necesita muchísimo”, indicó el dirigente rural.

A pesar del contexto de complejidad, la Expoactiva no perdió el nivel que la posiciona como la muestra agro industrial más importante del país.

“Las empresas hicieron un esfuerzo por participar, éste año quizás se economizó utilizando estructuras más permanentes que quedaron del año pasado, pero en definitiva hay conformidad. Uno de los que vende ‘fierros’, que de antemano uno podía pensar que era lo que menos podía funcionar, me dijo que mucha gente lo visitó interesados en sus equipos”, manifestó uno de los organizadores.

PERSPECTIVAS

El viernes, el economista Gabriel Oddone, dejó en claro que el gobierno tiene poco margen de maniobra para implementar políticas de apoyo al sector y advirtió que los productores deben esperar más de los mercados internacionales y del clima que del propio gobierno.

“Ya por el impacto de falta de agua, el volumen de producción en lo agrícola arroja pérdidas por US$ 500 millones. Eso nos da una idea de que la llegada de lluvias es mejor que cualquier medida que se pueda tomar”, dijo Rodríguez. Aclaró que “por supuesto que las medidas ayudan, pero también hay mucha cosa que se puede hacer hacia adentro, son cosas que vemos y tratamos en la Expoactiva que al productor pueden ayudarlo”.

No duda que 2018 y parte de 2019 “serán años difíciles” y relató que de las charlas a lo largo de la semana “con los diferentes expertos que vinieron a disertar y con productores que llegaron desde distintos puntos, uno se lleva una idea más cabal de la situación y lo complicado que está todo. La empresa tiene que seguir porque somos de vocación agropecuaria, tenemos que ir hacia adelante y ver cómo le buscamos la vuelta”.

INNOVACIÓN

Este año, el premio a la innovación fue obtenido por la empresa Marco Natural, que presentó un barral de fumigación selectiva que permite mediante un sensor, aplicar cuando se detecta la maleza. La tecnología permite ahorrar en el suministro de agroquímicos y ayuda a preservar mejor el medio ambiente.

“Lleva el premio por el cuidado al medio ambiente y por el ahorro en el costo hacia el productor. El equipo no es extremadamente caro, ahorra en los costos y fundamentalmente es amigable con el medio ambiente”, detalló Rodríguez.