La premisa de aumentos ininterrumpidos de stocks de granos y oleaginosas en el mundo parece detenerse y si bien no sabemos para cuanto alcanza este rally, recordá siempre que “la tendencia es tu amiga”.


La harina se descontroló y los pronósticos de escasas lluvias en Argentina agregan combustible a este infierno que está ardiendo. Como hemos comentado durante las últimas columnas, Argentina al ser el principal exportador de harina, ha sido el indicador por excelencia en el comportamiento del precio de este commodity. Lógicamente el cultivo de soja en Argentina no se hace más grande, y si bien se estima una menor molienda para este año, con las condiciones de reducción de producción dadas al momento, la misma no será increíblemente menor que la molienda del año anterior ya que la ecuación podría quedar de la siguiente manera: Stock final de la campaña anterior (que hoy permite un buen margen de molienda, con una venta del Farmer algo errática pero que avanza con la suba de precios), algo de importaciones temporarias de Paraguay unas 2,7-3 millones de toneladas (doble que la campaña anterior) y un posible recorte del saldo exportable de poroto de soja. Con todo esto nos quedamos con una molienda normal, sin embargo, como el mercado está secuestrado muchas veces por irracionalidad, la especulación se ha cargado en la harina, los fondos treparon hacia el lado de las compras y se estuvieron buscando precios diarios la mayoría de las últimas sesiones.

El mercado real no encuentra un desabastecimiento de harina, las posiciones inmediatas continúan acarreadas y el resto del complejo no acompaña el movimiento al mismo ritmo. Si bien la soja también ha experimentado subas, estas no han sido en la misma proporción que la harina, y del aceite mejor ni hablar. El margen de molienda ha llegado a valores de 1,65 centavos/bushel cuando los molinos ya cerraban excelentes márgenes en 1,2 centavos/bushel y así todas industrias en Estados Unidos generan márgenes positivos. El consumidor final que ya se esperó, tendrá que comprar para alimentar animales y va a tener que hacerlo con harina en estos valores y luego para ser prudente buscara la protección con puts, y para lo que no quieran cerrar precio, la compra de calls y calls spreads continúa siendo una herramienta un poco cara, pero válida. El mercado además podría encontrar sustitutos, y es donde juega la soja extrusada.

Los fondos en maíz salieron de su impresionante posición corta y sin embargo el precio no se había escapado groseramente de los rangos como sucedió en la harina. La venta del Farmer había absorbido gran parte de esta salida de fondos hasta el momento, ya que ahora los promedios móviles y resistencias se han superado y el mercado no muestra señal de cansancio. Estados Unidos será por el momento la única fuente de abastecimiento de maíz al mundo mientras no se tenga certeza de producción de Safrihna desde Brasil y una idea más real del problema productivo en Argentina. Si bien los stocks finales de USA son prudentes, el comportamiento de isla es algo que les gusta comprar a los especuladores.

El trigo sufre falta de agua en las planicies, la proporción en la condición de pobre y muy pobre se incrementa, y si bien la correlación en la condición de cultivo y rendimiento no es tan importante, nuevamente la percepción es más importante en este momento.

En conclusión, todo esto nos indica acción, el mercado se movió y se mueve, las volatilidades cambian y la variedad de estrategias para combinar es infinita. Ahora te toca actuar a vos.

Por Celina Mesquida – RJO´Brien
Fuente: Agroeducacion