La Federación Departamental de Productores de Leche de Santa Cruz (Fedeple), a través de su presidente José Luis Farah, manifestó su preocupación por los casos de abigeato que viene sufriendo el sector lechero en el departamento. En dos semanas la institución reporta la pérdida de 10 vacas lecheras de alta genética, preñadas, que tienen un valor de $us 30.000.
Según datos estimados de Fedeple, al año el sector pierde más de $us 300.000 por casos de abigeato. "Este delito se ha convertido en una verdadera plaga, que diezma la actividad productiva y, sobre todo, pone en riesgo la integridad física del productor y de sus trabajadores, así como también la salud pública al faenar estos animales en condiciones insalubres", explicó Farah.
El caso más reciente ocurrió la madrugada del martes (20 de febrero) en la localidad de Burgos, Portachuelo, donde dos animales fueron faenados a la intemperie. El representante del sector lechero señaló que los abogados de Fedeple están haciendo seguimiento a este caso, y que esperan la respuesta oportuna de las autoridades. Sin embargo, afirmó que muchos productores son reacios a presentar sus denuncias debido al costo que significan los procesos judiciales y a la poca efectividad para encarcelar a los responsables.
Farah afirmó que, ante la falta de normas drásticas que sancionen este delito, el sector lechero y ganadero planteó en su momento el incremento de la pena por abigeato. “Ratificamos el pedido de modificar el código penal para los temas de abigeato con penas que vayan de ocho a 12 años de cárcel, que incluyan a transportistas y comercializadores de carnes de dudosa procedencia, decomisando medios de transportes y equipos de frío donde se encuentre la carne sin la debida certificación del Servicio Nacional de Sanidad Agropecuaria e Inocuidad Alimentaria”, explicó.
