En medio del creciente debate por el uso de agroquímicos, también aumenta la cantidad de productores ecológicos y orgánicos en el país. Y esta provincia no escapa de la tendencia, ya que en los últimos años fueron sumándose proyectos de distintos tamaños y con diferentes combinaciones de producción.

 

"Córdoba Agroecológica" es un documental producido por el Grupo de Investigación en Agroecología de la Facultad de Agronomía y Veterinaria de la Universidad Nacional de Río Cuarto y UniRío TV. Son cortometrajes que reúnen 14 experiencias agroecológicas de toda la provincia, con campos ganaderos, agrícolas, hortícolas, viñedos y mixtos que va desde las tres hasta las 4200 hectáreas.

 

 

El factor común es el objetivo de cuidar y respetar el ambiente. Entre los emprendimientos se destaca Las Dos Hermanas en Arias, al sudeste de Río Cuarto, un campo de 4200 hectáreas de la Fundación Rachel & Pamela Schiele.

 

Del total de tierras, 1700 hectáreas son campos altos de buena aptitud agrícola que rotan alfalfa y pastura, 2000 hectáreas son campos naturales de cría bovina y las otras 1000 son de reserva, de conservación del pastizal pampeano.

 

 

La estancia obtuvo certificación como productora de orgánicos en 1992 y el objetivo es continuar con esa producción.

 

Hacen ganadería de ciclo completo, el 70% de la producción es de razas británicas; tienen certificación orgánica para la Unión Europea y están trabajando para la de los Estados Unidos (destino al que todavía no está abierta la exportación de carne argentina). La alimentación de los animales es forrajera y la suplementación se hace con granos orgánicos propios de la estancia; no hay confinamiento ni feedlot.

 

 

La agricultura apuesta a la mayor diversidad posible y combaten las malezas y plagas sólo de manera mecánica y con productos certificados para producción orgánica. Los resultados económicos, explican, son "aceptables".

 

El Mate, en Adelia María, son 330 hectáreas destinadas a la cría de ovejas, vacas y pollos. Una de sus buenos resultados es su sistema de pastoreo, aplican el método Voisin con un pastoreo racional y facilitando la recuperación en períodos de descanso.

 

En el campo hay 170 parcelas para vacas y 120 para ovinos; los animales están uno o dos días en cada una, lo que permite a las praderas regenerarse. "Alimentamos al suelo y no a la vaca", indicó.

 

Opciones

 

A esas experiencias se suman otras como las de la granja La Libertad (Río Cuarto), tres hectáreas en donde hace 11 años se producen verduras de estación, monte frutal y animales; hacen variedades de maíces andinos y con su molino harina de algarroba, arrope y café.

 

La finca La Matilda en San Javier (Traslasierra) une la agroecología con una hostería. Tienen su huerta orgánica y cabras, con cuya leche producen queso y dulce de leche; también viñedos, y frutales. En la misma zona, en Las Tapias, Aloe es una huerta orgánica que lleva cinco años; sus dueños venían de tres décadas de producir aromáticas.

 

Altos Verdes, en Las Acequias (sur provincial), son 400 hectáreas que desde 1994 tienen certificación orgánica; su producción es agrícola ganadera. La Mandingam, en Almafuerte, apuesta a los pollos, gallinas y cerdos.

 

La Granja Huerta Inambú en Villa General Belgrano (Calamuchita) tiene frutales y forraje para sus gallinas y vacas. Viñedo Vissani en Colonia Caroya trabaja desde este año con técnicas agroecológicas sus ocho hectáreas; hasta 2017 la aplicaban a los frutales y a sus pollos y ovejas.

 

En Existir, en Ferreyra, (pegado a la ciudad de Córdoba), Raúl Fermanelli produce papas, maíz, trigo, garbanzo y ajos, El Buen Vivir (Alpa Corral) desarrolla apicultura orgánica, agricultura (maíz y verdeos) y cría vacas, Pueblo Mampa (Villa María) cultiva frutales y huerta en el escaso monte nativo que queda en llanura, en la misma zona Eco Granja Sol y Luna tiene como objetivo los granos sin gluten (maíz, soja y sarraceno) y Granja Malky (Amboy) cuenta con una huerta.