Según un informe del INTA, que considera un pronóstico de lluvias hasta el próximo lunes, en los próximos días habría precipitaciones de "variada intensidad en áreas del centro y norte argentino con mayores acumulados, de manera localizada, en las provincias de Córdoba (en el norte), el NOA y el extremo noreste".

Para esas regiones, las lluvias "se encontrarían en el rango normal a superior a lo normal", mientras que sobre La Pampa y Buenos Aires serían inferiores a las esperadas.

Para el caso del norte, ayudarían a la siembra de soja y maíz. Sin embargo, no cambiaría la situación actual en la provincia de Buenos Aires, con sectores con reservas escasas.

Según el reporte, se espera que sobre el centro y norte del país dominen vientos del sector norte y noreste, con continuo ascenso de las temperaturas.

Para el viernes se prevé un pasaje de frente frío con vientos que rotarán al sudeste provocando lluvias y tormentas de variada intensidad sobre el centro y el oeste del territorio. "Hacia el fin de semana las tormentas podrían intensificarse y extenderse hacia el norte del país, especialmente sobre Cuyo, Córdoba, sur de Santa Fe y noroeste de la provincia de Buenos Aires", consigna el informe.

En este contexto, un informe de Eduardo Sierra, especialista en agroclimatología, alerta que "se debe prever el riesgo de que la campaña siguiente, 2018/2019, comience con escasas reservas hídricas a lo que podrían sumarse precipitaciones escasas, determinando un escenario sumamente limitante".

Para Sierra no sería extraño que el proceso en marcha marque una transición en el estado del sistema climático sudamericano poniendo fin a la fase húmeda y dando inicio a una fase seca, que podría prolongarse a lo largo de varias campañas. "Habría que continuar una rigurosa vigilancia climática a fin de anticipar los posibles riesgos que irán emergiendo a lo largo de la temporada y tomar las medidas que correspondan", alerta el especialista.