En esta etapa del año, los trigos de invierno de las Grandes Planicies estadounidenses deberían estar "durmiendo" bajo una capa de nieve capaz de resguardarlos de las gélidas temperaturas. Sin embargo, existen zonas donde esa cobertura es débil y donde la actual ola de frío podría afectar gravemente la condición de los cultivos en una región que, además, padece de déficit hídrico en cerca del 80% de sus suelos.

Todo esto se reflejó sobre las pizarras en las primeras dos ruedas de negocios de 2018. Las posiciones marzo y mayo del trigo en la Bolsa de Kansas subieron US$ 2,30 y 2,21, mientras que sus ajustes resultaron de 162,04 y de 166,82 dólares por tonelada. Así, en lo que va del año, estos contratos mejoraron un 3,22 y un 2,95% frente a los valores vigentes el viernes, de 156,99 y de 162,04 dólares.

El mayor impacto del riesgo climático se da sobre la Bolsa de Kansas porque ese es el principal ámbito de comercialización del trigo de invierno. No obstante, las subas también se registraron en Chicago, donde los contratos marzo y mayo aumentaron US$ 0,91 y 0,73, al cerrar con ajustes de 160,20 y de 164,70 dólares por tonelada. En lo que va de la semana estas posiciones acumularon alzas del 2,10 y del 1,82% frente a los 156,90 y a los 161,76 dólares del cierre de 2017.

En su reporte sobre cultivos por Estado, el USDA relevó en estado bueno/excelente el 37% del trigo de invierno de Kansas, por debajo del 51% vigente a fines de noviembre pasado y del 44% de igual momento de 2016.

Peor aún fue el dato para Dakota del Sur, donde la proporción de cultivos en condición óptima fue del 20%, contra el 18% de noviembre y el 56% vigente un año atrás. En mejor posición quedó Nebraska, con un 64% en estado bueno/excelente, por encima del 59% de noviembre y del 46% de igual momento del año pasado.

Cabe recordar que el trigo de invierno aporta cerca del 75% del volumen de trigo producido por los Estados Unidos y que su cosecha comienza a mediados de mayo. Según los últimos reportes climáticos manejados por los operadores, para los próximos 6 a 10 días se prevén temperaturas inferiores a las marcas usuales para la época del año en buena parte de las zonas productoras de trigo.

En el mercado doméstico el trigo se mantuvo firme, en $ 3000 por tonelada disponible para el Gran Rosario y para Bahía Blanca, y en $ 2950 para Necochea.

La Bolsa de Cereales de Buenos Aires informó que los molinos pagaron entre 2750 y 3350 pesos por tonelada de trigo, según calidad, procedencia y forma de pago.

En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), la posición enero del trigo subió US$ 0,60 y terminó con un ajuste de 165 dólares por tonelada, mientras que el contrato julio retrocedió US$ 0,50 y terminó la jornada con un valor de 174,50 dólares.

Subas para la soja

La depreciación del peso frente al dólar; la intención de seducir a los vendedores en el inicio del "nuevo ejercicio", y la reducción del 0,5% de los derechos de exportación impulsó a los compradores a elevar de 4700 a 4800 pesos su oferta por la tonelada de soja disponible para la zona del Gran Rosario. Además, en operaciones muy puntuales algunos interesados convalidaron hasta $ 4850 por lotes importantes y con entregas en el muy corto plazo. Según fuentes del sector, durante la rueda se negociaron unas 70.000 toneladas de la oleaginosa.

El Ministerio de Agroindustria de la Nación fijó el FAS teórico de la soja para su exportación en 4833 pesos por tonelada, mientras que, para la industria aceitera, la Bolsa de Comercio de Rosario calculó la capacidad de pago en 4797 pesos.

Sin ofertas abiertas de los compradores, las propuestas que trascendieron en el mercado por la soja de la nueva cosecha con entrega en mayo oscilaron de 255 a 258 dólares por tonelada para el Gran Rosario.

La tónica alcista también se reflejó en el Matba, donde las posiciones enero y mayo de la soja sumaron US$ 4,50 y 1,10 tras cerrar con ajustes de 264 y de 261,60 dólares por tonelada.

Las pizarras de la Bolsa de Chicago mostraron subas de US$ 1,76 y de 1,46 sobre los contratos enero y marzo de la soja, cuyos ajustes resultaron de 352,65 y de 355,95 dólares por tonelada. El clima mayormente seco y caluroso en la Argentina volvió a ser el principal factor alcista para las cotizaciones estadounidenses.

Estabilidad para el maíz

Por tonelada de maíz argentino, los exportadores ofrecieron $ 2750 para Bahía Blanca y $ 2700 para el Gran Rosario, sin cambios, mientras que para Necochea la propuesta creció de 2700 a 2750 pesos. El cereal de la nueva cosecha, con entrega desde marzo, se mantuvo estable, en 147 dólares por tonelada.

En el Matba, las posiciones abril y julio del maíz subieron 0,20 y 0,10, mientras que sus ajustes fueron de 150,20 y de 145,30 dólares por tonelada.

La misma estabilidad se evidenció en Chicago, donde el contrato marzo del maíz aumentó apenas US$ 0,10 tras cerrar con un valor de 138,97 dólares y donde la posición mayo terminó la rueda sin variantes, en 142,22 dólares.