Y por lo visto ayer en el ámbito de la Bolsa de Comercio de Rosario, la negociación no será sencilla.

Desde el inicio de la rueda, la oferta abierta de las fábricas fue de $ 4400 por tonelada de soja, un precio que fue rechazado por los vendedores y que implicó una baja de $ 100 respecto de anteayer. "Hoy (por ayer) a la demanda no le importaba cerrar nuevos negocios, sino bajar las expectativas de los vendedores, que esperaban poder fijar mercadería en un valor cercano a los $ 4600", contó a LA NACION una fuente del sector comercial.

Añadió que para los compradores la misión de las próximas semanas será cerrar "márgenes convenientes", por lo que difícilmente vayan a elevar sus propuestas por la tonelada de soja, sobre todo en momentos en los que los valores internacionales están flojos y donde se registra una relativa firmeza del peso frente al dólar.

Un dato a tener en cuenta: al vencimiento del contrato "a fijar", si no hubo acuerdo entre las partes el comprador tiene la potestad de definir el precio.