La Unión Europea (UE) ha acordado este lunes la renovación de la licencia del herbicida glifosato, con el voto favorable de 18 países, 9 en contra y 1 abstención, una decisión que la Comisión Europea (CE) adoptará antes del 15 de diciembre, durante un periodo de cinco años, hasta diciembre de 2022.

La decisión ha sido adoptada por los Estados miembros en el llamado Comité de Apelación, un órgano que había sido convocado después de que las capitales no consiguieran una mayoría a favor o en contra el pasado 9 de noviembre.

Según informaron fuentes comunitarias, los expertos del comité de apelación de la CE emitieron así "una opinión favorable" con mayoría cualificada sobre la propuesta de la CE.

"El voto de hoy demuestra que cuando todos queremos, somos capaces de compartir y de aceptar nuestra responsabilidad compartida en la toma de decisiones", ha destacado el comisario de Salud y Seguridad Alimentaria, Vytenis Andriukaitis.

El Ejecutivo comunitario ha subrayado además que la propuesta cuenta con el "mayor apoyo posible" por parte de los Estados miembros, así como que la renovación del permiso del glifosato durante cinco años "garantiza un alto nivel de protección para la salud humana y el medio ambiente en línea con la legislación europea".

Ecologistas piden el uso de alternativas más saludables
Antes de la reunión una treintena de activistas de la plataforma "Stop Glifosato" pidieron al presidente de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, que impida la renovación de la licencia del glifosato por cinco años más en la Unión Europea (UE).

La manifestación se ha producido durante la reunión de expertos de la UE, en un comité de la CE, en el que han acordado la renovación de la licencia que permita su uso por otros cinco años más.

Los ecologistas se concentraron bajo la lluvia en el corazón del barrio europeo con una pancarta en la que se podía leer "Democracia vs. Glifosato", para pedir que la CE no se decantara por este pesticida.

Los activistas hicieron una actuación en la que dos de los manifestantes, que vestían caretas de Juncker y del comisario de Salud y Seguridad Alimentaria, Vytenis Andriukaitis, tenían que decidir si ponerse del lado de Monsanto, una de las multinacionales que utiliza este pesticida, a la que representaron con dos caretas de calaveras, o del de los ciudadanos europeos.

El eurodiputado español de Equo, Florent Marcellesi pidió que la CE y los Estados miembros "escuchen al Parlamento Europeo (PE) y a la ciudadanía", y destacó que el glifosato "es malo para la salud, las personas y el medioambiente".

Asimismo, Marcellesi consideró que "hay un conflicto de intereses clarísimo entre Monsanto y el glifosato" y subrayó que "existen alternativas saludables" para sustituir al pesticida más utilizado en la Unión Europea.

FUENTE: rtve.es