El ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Tabaré Aguerre, afirmó esta tarde en conferencia de prensa que el gobierno no descarta recurrir a organismos internacionales si Brasil persiste en la medida de dejar de importar productos lácteos uruguayos.

Brasil no dejó ingresar a su país camiones pertenecientes a dos empresas que transportaban queso. Uno tenía 7 toneladas y otro 14 toneladas del producto. Los mismos finalmente cruzaron la frontera, pero todavía hay otros dos camiones que aguardan para pasar por la frontera hacia Brasil.

En primera instancia, como respuesta, Uruguay “enlenteció” el ingreso de camiones brasileños al país, informó Aguerre. La medida espejo fue con la intención de “generar diálogo político”. No obstante, el ministro afirmó que “la medida de Uruguay ya se levantó”.

“Sorpresa”. Aguerre dijo que se enteró de la resolución de Brasil por WhatsApp al mediodía de ayer martes y que “la reacción de todos fue de sorpresa: no hubo comunicación oficial. La forma y el contenido nos sorprendieron”.

En ese sentido, el ministro dijo que la “Cancillería realiza gestiones al más alto nivel” y que se convocó “al gabinete de competitividad para analizar toda la relación comercial. De mañana se detuvieron camiones con lácteos. Estamos reteniendo toda la mercadería que viene de Brasil”.

En opinión de Aguerre lo que sucede “no tiene que ser entendido como una compadrada (…) Confiamos en una solución política”. De todas formas planteó: “No descartamos ir a órganos del Mercosur y a la Organización Mundial de Comercio (OMC)”.

El ministro de Relaciones Exteriores, Rodolfo Nin Novoa, en tanto, volvió a expresar preocupación: “Lamentamos profundamente. Nos duele tener que estar tomando estas medidas”, dijo.

El canciller afirmó que ya se puso “en contacto con todos los actores (…) Llamé al canciller brasileño (Aloysio Nunes) a Marruecos, me aseguró que velará por una buena relación”.

Pero aseguró que “es insostenible hablar de triangulación: es francamente violatorio de las normas de la OMC lo que hace Brasil, es inconveniente cuando negociamos con la Unión Europea (UE)”. El canciller agregó: “No queremos tomar medidas espejo. No nos corresponde hacer conjeturas de que hay detrás de esto”.