El incremento de los envíos de carne vacuna uruguaya a la Unión Europea en el marco de la cuota 481 —el cupo de alta calidad para animales terminados a granos durante los últimos 100 días previos a la faena— hizo subir, puntualmente, el precio promedio por tonelada a US$ 3.906, acercándolo al récord de US$ 4.000 de años atrás.

Según los datos estadísticos del Instituto Nacional de Carnes (INAC) el precio promedio llegó a US$ 3.906 por tonelada en la semana comprendida entre el pasado 10 y el 16 de septiembre, donde se embarcaron 8.806 toneladas peso canal por US$ 34.394.000.

El presidente de la Asociación de la Industria Frigorífica del Uruguay (Adifu), Marcelo Secco recordó a El País que “hay un efecto que es la concentración que el mercado está exigiendo de faena y envíos de cuota 481 en períodos muy cortos. Eso hace no sólo que el precio del ganado sea mucho más alto, sino que a su vez, cuando se carga mucha carne de la cuota 481, que vale dos veces el valor de la tonelada promedio, dispara el precio promedio de la tonelada de carne bovina uruguaya”.

Secco consideró que el precio promedio de la tonelada uruguaya volvería a “sus niveles normales” en la presente y la próxima semana, donde no hay tantos envíos de carne a la Unión Europea en el marco de la cuota 481. “No hay negocios puntuales que estén moviendo tanto el promedio fuera de lo que es el envío dentro de la cuota 481”, afirmó el CEO de Marfrig para el Cono Sur.

Es que para que llegue dentro del nuevo trimestre, la industria frigorífica uruguaya se ve obligada a cargar los embarques de carne vacuna de alta calidad para el cupo 481 en septiembre para que esos contenedores puedan salir de las Aduanas europeas en octubre.

De este modo, no habría tanto peligro de que esa carne enviada al viejo continente no entre dentro del nuevo trimestre, pero esa operativa de embarques limita el trabajo regular de la industria cárnica uruguaya todos los meses. En los últimos años Uruguay viene pudiendo aprovechar a fondo la cuota 481, que cada vez tiene más proveedores, pero la incertidumbre sobre su futuro sigue pendiente, aunque en el horizonte cercano no se avizoran cambios.

Mercado. El CEO de Marfrig para el Cono Sur también analizó el mercado mundial de carnes y dijo verlo con las mismas características que hasta ahora. “Para las malas noticias que se ven, ojalá que esto continúe en forma medianamente estable y ese valor promedio, que en el año estuvo en el eje de US$ 3.400 por tonelada, podríamos pensar que lo podemos proyectar para adelante”, reconoció.

Secco consideró que, por otro lado, “hay una realidad y es que estamos a un mes y medio de enfrentar una baja de la demanda China —por las fiestas—, así como la renegociación y las exigencias adicionales de Israel que requieren inversión” de las empresas. Para el industrial, “todas esas cosas están haciendo que a igual precio y a costos en dólares crecientes, el negocio se ponga más desafiador. Al sector primario le pasa exactamente lo mismo”, reconoció Secco.