Productores porcinos se reunirán esta semana con el ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, en un intento por frenar el proceso de apertura a la importación de productos provenientes delos Estados Unidos.

El presidente de la Asociación Argentina de Productores Porcinos (AAPP), Juan Uccelli, dijo ayer que, de todos modos, el sector no guarda muchas expectativas porque, dijo, fue una decisión tramitada "del ministro de Producción, Francisco Cabrera para arriba".

El dirigente insistió con que el ingreso de carne de cerdo desde los Estados Unidos puede generar "un problema sanitario" a la producción local, y anticipó que el sector solicitará a los gobiernos provinciales que intervengan para el control de importaciones desleales. Defendió, en ese sentido, que la Argentina es "el único país libre de una enfermedad que tiene Estados Unidos y que se encargó de diseminar por todo el mundo y en América en especial". Y, a pesar de que esa enfermedad es exclusiva del cerdo y que no afecta al hombre, "puede condicionar a la producción nacional"

Como se informó en la edición de ayer, el presidente de la Sociedad Rural, Luis Etchevehere, sostuvo que los productores porcinos tienen "excelentes condiciones para competir con cualquiera" y se mostró favorable a la importación de carne de cerdo de Estados Unidos, aunque con "condiciones de competitividad" que contemplen un alivio fiscal, en especial, gravámenes provinciales. "El sector porcino argentino es de los más eficientes del mundo: en lo referido a eficiencia y productividad está en el mismo nivel que en los Estados Unidos y por encima de Europa y Brasil, por lo que el trabajo es abrir los mercados pero con condiciones de competitividad", explicó Etchevehere.

Sin embargo, Uccelli también advirtió que el sector porcino está sufriendo "desde hace dos años la apertura de las importaciones y si bien el sector está de acuerdo en competir, hay una competencia desleal cuando traen un producto congelado y le dicen a la gente que es un producto fresco".

"Hay que seguir importando para hacer fiambres de segunda categoría, y hay una industria que importa para eso, el tema es cuando traen para vender como carne fresca algo que es congelado mientras los gobiernos nacional, provinciales y municipales miran para otro lado", indicó.

También la Federación Agraria Argentina había criticado la apertura a los cerdos y cuestionó que el Gobierno, con esta decisión, "en lugar de ser supermercado pasaremos a ser el depósito donde éste país meta las cosas que no puede ubicar en otros lugares". Además, apuntó contra la racionalidad económica de la medida para el consumidor, porque, según la Federación Agraria,

"desde el 2015 a la fecha, la importación aumentó un 235 % y no hubo impacto en los precios en góndola. Pero sí hubo una profundísima afectación para los productores chancheros".