Los precios pagados por la leche a los tamberos argentinos se acercaron, en equivalente en dólares, a lo que cobran productores de otros países competidores, inclusive los Estados Unidos.

Así se desprende de un relevamiento del Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA), que compara los precios de mayo de 2017 versus mayo de 2016.

Según el OCLA, en mayo de 2017 los productores argentinos cobraron en equivalente a la divisa norteamericana US$ 0,348 el litro. En igual mes del año pasado, los tamberos locales estaban en US$ 0,283, con lo cual tuvieron en esa moneda una recuperación del 22,9 por ciento.

Por su parte, los tamberos de EE.UU. recibieron en mayo de 2017 US$ 0,368 el litro, no tan lejos de los argentinos.

En el Cono Sur, los uruguayos cobraron en mayo pasado US$ 0,361 el litro, con una recuperación del 29,8%. En tanto, en Chile el valor fue US$ 0,36 el litro.

De la región, en Brasil están los precios más altos, inclusive de toda la lista de países comparados. Allí los productores cobraron en mayo pasado US$ 0,431 el litro.

Mientras tanto, al tomarse la Unión Europea con 28 naciones allí los productores cobraron en mayo de 2017 US$ 0,366. En tanto, en Nueva Zelanda, país donde la leche aporta el 25% de las exportaciones totales, el valor de mayo de este año se ubicó en US$ 0,363.

Según el OCLA, en base a datos de Agroindustria, en pesos los tamberos argentinos cobraron en mayo último $ 5,46 el litro, una suba del 37,8% versus igual mes de 2016.

El estudio refleja también que mejoró el poder de compra de la leche versus insumos clave. El año pasado, con un litro de leche el productor compraba 1,45 kilos de maíz; ahora adquiere 2,30 kilos.

Por el efecto del clima y el cese de tambos, la producción acumulada de enero a mayo muestra una merma del 6 al 8% respecto de igual período de 2016. Sin embargo, en mayo pasado, por segundo mes volvió a crecer la producción y lo hizo un 3%.

"Los números actuales de precios de la leche, costos, relaciones insumo/producto, clima y precios internacionales, son mucho más favorables que los existentes desde finales de 2015 y hasta principios de 2017", dice el OCLA, que no obstante advierte que "no será una tarea sencilla" recuperar pérdidas por el clima y los precios. La situación es crítica en zonas inundadas, como el oeste bonaerense.

Sobre el panorama para el resto del año señala: "La producción de leche se viene recuperando de los bajos niveles del año pasado, y de no mediar cambios significativos en las principales variables es altamente probable que todo el segundo semestre presente tasas interanuales positivas, con chances de cerrar el año 2017 con una mejora que podría estar entre el 1% y 3% respecto a la producción de 2016".