Garciarena visitó la Estación Experimental Agropecuaria (EEA) Sáenz Peña, donde se presentaron 5 líneas genéticas de algodón con alto desempeño agronómico, portadoras de los eventos de primera generación para resistencia a orugas lepidópteras y glifosato.
Otra de las tecnologías desarrolladas por el INTA es la selección de líneas con bráctea frego (variedad que permite mayor exposición del picudo a las aplicaciones de insecticidas) tolerantes a Picudo del Algodonero. Estas líneas fueron obtenidas en el marco del convenio con las provincias algodoneras de Chaco, Santiago del Estero, Formosa y Santa Fe y se estima que se inscribirá la primera variedad en el 2018. Esta fuente de tolerancia es no transgénica y genera una reducción de la plaga de 65% y una disminución en la aplicación de insecticidas del 50%.
Luego, el Director se trasladó a la EEA Las Breñas, donde mantuvo reuniones con técnicos del Programa de Desarrollo Rural y Agricultura Familiar (PRODAF) y con la Unión de Cooperativas Algodoneras Limitada (UCAL). El objetivo fue explicar cómo se están organizando los Entes Sanitarios, la herramienta que Agroindustria está implementando junto al SENASA para controlar la plaga del picudo del algodonero.
Tanto la innovación genética como el programa de Entes Sanitarios son parte de los tres ejes principales que el Ministerio desarrolla para el sector algodonero. Se suma a estos el programa Procalgodón, que se ejecuta en conjunto con el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), el Ministerio de Producción y el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI).
