El Gobierno logró destrabar el conflicto yerbatero luego de que ayer, en el Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM), se alcanzara un acuerdo entre los productores, las provincias productoras, los secaderos, los molinos, las industrias, las cooperativas y los trabajadores, que son parte de ese organismo, con sede en Misiones.

Vale recordar que el 2 del actual los productores yerbateros regalaron 30.000 paquetes de yerba en la Plaza de Mayo como protesta por el precio que cobran. Además, en los últimos días mantuvieron ocupada la sede del INYM impidiendo el ingreso de su personal.

Aunque no estuvo en el encuentro de ayer, según trascendió, a la distancia tuvo un rol clave para el cierre de la negociación el secretario de Coordinación y Desarrollo Territorial del Ministerio de Agroindustria de la Nación, Santiago Hardie. También jugó el mismo ministro, Ricardo Buryaile, que horas antes de la reunión dejó trascender a los productores que el precio que se laudará próximamente se acercaría a lo que pide el sector. Los productores quieren que el gobierno nacional laude para el período abril-septiembre un valor de $ 6,10 para el kilo de hoja verde, por encima del anterior precio de 5,10 pesos el kilo, que si bien se había conseguido por consenso, no por laudo, no se cumplió en todas las zonas productoras. Hubo denuncias de precios inferiores a $ 3,80.

Según lo acordado ayer, se limitarán nuevas plantaciones de yerba hasta 2019, de manera tal de bajar la sobreoferta de mercadería, factor que presiona sobre los precios. Desde 2002, fecha de creación del INYM, nunca se tomó una medida similar. Alberto Re, presidente del organismo por el Estado, dijo a LA NACION que esta decisión implicará una "prohibición" para nuevas plantaciones. Y explicó: "Vamos a intentar un sistema que se pueda autoregular".

El sector también viene de sufrir la caída de exportaciones. Un 60% de la yerba iba a Siria, pero la guerra en ese país hizo caer ya los volúmenes a 28 millones de kilos.

Entre las medidas también se establecerá la obligatoriedad para que, una vez finalizada la cosecha, un 20% de la superficie total quede sin recolectar.

"Se va a ir autorizando la cosecha por escala (de productor) para ir regulando", señaló Omar Príncipe, presidente de Federación Agraria Argentina (FAA), entidad que había realizado propuestas para superar el conflicto. Sobre esto último que comentó Príncipe, Re precisó que "eso está pensado para los productores más chicos".

Entre otros puntos, también habrá una fiscalización por parte de la AFIP y Agroindustria para el control del precio de la materia prima. Por otra parte, habrá un mecanismo de financiamiento a cargo de bancos, gobiernos provinciales y el INYM para destinar $ 200 millones para compra de materia prima. Lo usarían los secadores (actores que hacen la primera transformación en yerba canchada) y los productores. La ayuda podría subir con aportes del Fondo Fiduciario Nacional de Agroindustria (Fondagro), del Ministerio de Agroindustria, a cargo del economista Ernesto Ambrosetti.

"Esto destraba la situación y va camino a solucionarse", dijo el presidente de Federación Agraria sobre el acuerdo, y agregó que "se consiguió el compromiso de un laudo cercano" al precio que piden los productores.

Números del conflicto

$ 6,50

Precio

Es el valor por kilo que piden los productores yerbateros para cubrir sus costos. Denuncian que estuvieron cobrando por debajo de $ 3,80.

30.000

Paquetes

Es el volumen de yerba que regalaron en Plaza de Mayo en la protesta de principios de mes.