El presidente del Instituto Nacional de Carnes (INAC), Federico Stanham aseguró que Uruguay continúa siguiendo muy de cerca lo que está pasando en Estados Unidos con el cupo cárnico de alta calidad que ese país tiene asignado por la Unión Europea, en el marco del litigio de la carne con hormonas que duró más de 10 años.

Las quejas de los importadores de Estados Unidos, porque Uruguay y Australia están ocupando hoy más del 60% de una cuota global de 43.000 toneladas de carne bovina, generó la apertura de una audiencia pública y presiones fuertes para poder aprovechar más esta cuota que es de Estados Unidos, pero donde también participan terceros abastecedores. Hasta el momento, Estados Unidos no se quejaba porque no tenía carne para poder participar más de esta cuota, hoy la tiene y se replantea el funcionamiento.

“Estamos transitando todo un proceso. Terminó la audiencia pública y el llamado a comentarios. Estamos esperando que se nombre el representante de comercio de Estados Unidos, cuya venia la tiene que dar el Senado. Cuando estén los informes de las agencias americanas, el gobierno de Estados Unidos fijará posición”, explicó Stanham a El País.

Recién ahí se verá “si hay una postura de represalias o de negociar con la Unión Europea. En cuanto se abra el período de negociaciones estaremos cerca. Vamos siguiendo día a día lo que está pasando”, afirmó el presidente del INAC.

En los hechos Uruguay estaría pudiendo hacer uso de la cuota hasta por lo menos octubre, pero la incertidumbre generada por la postura de Estados Unidos sigue ocasionando bajas en el precio de la reposición.

La cuota 481/UE le mostró a la ganadería uruguaya que es posible trabajar en cadena, partiendo de la producción de un ternero con mayor kilaje y calidad, para que entre a los corrales de engorde con un determinado peso y luego ser terminado a granos durante los últimos 100 días previos a la faena. En los últimos años la industria uruguaya venía exportando unas 10.000 toneladas de carne vacuna dentro del cupo a un precio promedio de US$ 9.500 por tonelada.