La polémica de este año por las tarifas le alcanzó al Gobierno para tomar nota de sus errores. A diferencia de lo que ocurrió con el incremento del gas, el Ministerio de Energía, a cargo de Juan José Aranguren, presentó ayer, con dos meses y medio de anticipo, los ajustes que aplicará desde febrero de 2017 en los precios de la electricidad. Para la mayoría de los hogares el aumento rondará el 36%.

Los incrementos marcarán el inicio de un sendero de aumentos en el precio mayorista de la energía, que se extenderá hasta el final de la administración de Mauricio Macri, y tendrán como objetivo sobresaliente reducir los subsidios del Estado al consumo de electricidad.

La factura de un hogar promedio en el Gran Buenos Aires, en torno a los 300 kWh/mes, costará este mes unos $ 360. Desde febrero de 2017, en cambio, el mismo cliente deberá pagar $ 130 más, por lo que el aumento en su boleta será del 36%. Así lo confirmó ayer el secretario de Energía Eléctrica, Alejandro Sruoga, al disertar en una de las audiencias públicas que se hicieron en distintas ciudades para debatir los precios de la electricidad.

Según el funcionario, que estuvo acompañado por Aranguren, el 40% de los usuarios del área metropolitana, que consumen entre 150 y 300 kwh, tendrán subas de $ 110, mientras que los hogares de menor demanda recibirán una boleta $ 30 más cara.

En términos absolutos, el mayor incremento será para el 25% de los usuarios del servicio eléctrico, que consumen entre 600 y 1200 kwh, con subas de $ 430 mensuales.

El Gobierno no difundió cuál es la factura actual de esos consumos, por lo que resulta complejo hacer mayores comparaciones en base a los datos oficiales. LA NACION consultó la página web de Edenor, que permite estimar el valor de la factura para este mes según el consumo.

Si se toman las puntas de cada escala que planteó el Gobierno, los incrementos alcanzan el 22% en el caso de los usuarios entre 150 y 300 kwh y el 44% para los que están en la franja de 300 a 600 kwh (los datos de consumo se pueden corroborar en cada factura).

En términos porcentuales, el incrementó será sustancialmente mayor para los que estén en el medio de cada categoría. Por ejemplo, un usuario que consuma 400 kwh mensuales hoy paga $ 341 y deberá desembolsar al menos un 55% más desde la factura correspondiente a febrero del año próximo.

Las cifras anteriores contemplan el incremento en el precio mayorista de la energía que pagarán los hogares, los comercios y las industrias, más los ajustes en el servicio de distribución, que prestan empresas como Edenor y Edesur, y el de transporte.

Según Sruoga, el aumento "para alrededor de un 70% de los usuarios residenciales será igual o menor a 130 pesos por mes".

El objetivo del aumento es sincerar el mercado eléctrico. Hoy los hogares pagan sólo el 30% de lo que cuesta generar la electricidad. El resto lo cubre el Estado a través de subsidios. De una manera similar a lo que hizo con el gas, esa ayuda quedaría limitada a un 10% del costo en el último año de gobierno de Macri. Sruoga precisó que las tarifas que pagan los usuarios representaron en el período 1993-2002 el 100% de los costos, "pero con la aplicación del subsidio generalizado la tarifa se situó por debajo del 20% de los costos reales que tuvo la operación del Mercado Eléctrico Mayorista".

Energía gratis

El Gobierno sostendrá el año próximo la tarifa social, que contempla la cesión de un bloque de energía gratis de 150 kwh por mes. Según la estimación oficial, hay unos 4 millones de hogares que podrán acceder a ese precio diferencial. Para tenerlo, deberán recibir una remuneración bruta menor o igual a dos salarios mínimos ($ 15.120), entre otros requisitos. También quienes sean beneficiarios de programas sociales, personas con discapacidad, inscriptos en el monotributo social, pensionados por la guerra de Malvinas, empleados del servicio doméstico y personas que cobren seguro de desempleo.

Quienes no entren en esa categoría también tendrán alternativas para eludir los aumentos. Por caso, los usuarios que reduzcan 20% o más su consumo con respecto al mismo período del año pasado no tendrán subas. Y un usuario cuyo consumo se reduzca entre el 10 y el 20% tendrá una suba del 25 por ciento.

En términos técnicos, el Gobierno creará dos mecanismos de formación de precios mayoristas: uno con subsidios, y otro sin ellos. Ambos se calcularán anualmente, pero se revisarán semestralmente en función de los cambios que se registren en los parámetros de origen.

Igual que en la electricidad, el año próximo habrá aumentos del gas con el objetivo de reducir los subsidios que aporta el Estado para beneficiar a los consumidores.

Las claves de las nuevas tarifas de electricidad

30%

Costo de la energía

Los hogares pagan hoy un tercio de lo que cuesta generar electricidad.

90%

El plan hasta 2019

A final del mandato de Macri los subsidios cubrirían 10% del costo de la luz.

36%

El aumento para la mayoría

La mayor parte de los usuarios pagará $ 130 más en febrero que en diciembre.