El ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, Marcelo Martin, manifestó ayer, ante autoridades nacionales, el descontento del sector productivo por las medidas tomadas en torno a los reembolsos por puertos patagónicos -que fueron eliminados- y a la barrera sanitaria, abierta para el ingreso de carne porcina desde el norte del país. “Confío en que podremos encontrar un equilibrio, a través del diálogo permanente, para atenuar el impacto que causarán ambas decisiones”, afirmó.

En reunión de la Mesa Patagónica del Consejo Federal Agropecuario (CFA), que presidió el Secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Ricardo Negri, se logró acordar una reunión para el tratamiento de ambos temas, durante el mes de diciembre próximo, en el ámbito del Ministerio de Agroindustria, conducido por Ricardo Buryaile.

Del encuentro participaron también, el subsecretario de Ganadería, Rodrigo Troncoso, el presidente del Consejo Agrario Provincial de Santa Cruz, Javier de Urquiza, y funcionarios de las carteras productivas de Neuquén y Tierra del Fuego.

Durante el cónclave, Martin trasladó la molestia del sector productivo rionegrino ante el impacto que generará la eliminación de los reembolsos portuarios: “En función a lo trabajado con CAFI (Cámara Argentina de Fruticultores Integrados), manifesté que se pide que los reintegros puedan ser actualizados de manera tal que compensen el costo fiscal que tiene el sector productivo de fruta, compuesto por impuestos internos y desplazado, actualmente, casi a un 9%. Es decir, que la alícuota debería subir a ese porcentaje y también absorber el 7% que se estaría quitando de los reembolsos”.

El Ministro rionegrino aclaró que, independientemente de la cuestión porcentual de montos a reintegrar, lo que se solicita es una “mirada urgente” sobre ciertas medidas, tendientes a lograr que los puertos sean una opción válida y conveniente para el sector productivo y que, definitivamente, la oferta exportable no se vaya a la provincia de Buenos Aires, sino que pueda ser capitalizada por la infraestructura rionegrina. “El pedido concreto del sector privado es que los reembolsos no se eliminen”, afirmó.

Sobre el ingreso de carne de cerdo al sur del río Colorado

Por otra parte, el funcionario llevó también a la Mesa el planteo realizado por el sector productivo con respecto a la Resolución del SENASA que autorizó el ingreso de carne fresca de cerdo, sin hueso, enfriada y congelada, al sur del río Colorado.

En este sentido, señaló que la Nación expuso que “todo está chequeado y ordenado para habilitar ese permiso”, y propusieron generar medidas paliativas, en el corto plazo, para el sector porcino de nuestra zona, que tiene estructuras de costos más caras que los de Córdoba, Entre Ríos o Buenos Aires, que es de donde se supone que vendrá la mayor oferta.

Adelantó también que se pudo generar el compromiso de una reunión en Buenos Aires, con autoridades que tengan poder de decisión, a efectos de establecer un plan de salida a una barrera que no está funcionando bien. “Se pretende plantear una hoja de ruta inmediata –dijo- que nos permita pensar en una barrera eficiente, que pueda generar los controles necesarios para determinar si realmente está ingresando sólo carne de cerdo”.

Otros temas planteados en el CFA Patagónico

El resto de la agenda del CFA de las provincias Patagónicas transcurrió entre el análisis de problemáticas comunes y agendas estratégicas de desarrollo e inversión para distintos sectores productivos, considerados “claves” para Río Negro, como lo son el foresto - industrial, el de la pesca y la acuicultura, y el de la producción de frutos secos.

“En nuestro caso expusimos también la posición fuerte que va a tener la Provincia, con un perfil de Patagonia húmeda, con grandes zonas bajo riego, como productora de alimentos, para interactuar en una política ovina que pueda producir carne para comercializar en puntos turísticos”, sostuvo.

Al respecto, ejemplificó que se podría promover la venta de carne de cordero -con denominación de origen y un marketing bien definido- que pueda ser alimentado estratégicamente con producción forrajera industrializada proveniente de Río Negro.