CÓRDOBA. Los transportistas de carga no quieren quedar como los principales responsables de la suba de productos y, en ese marco, presentaron un "sistema de índices de costos" en base a todos sus insumos y cargas y sus variaciones mensuales. Así, desde octubre de 2015 hasta hoy el kilómetro de carga general entre Córdoba y Buenos Aires registró un alza de costos del 35 por ciento.

"No somos formadores de precios, estamos cansados de escuchar que nos responsabilicen a nosotros", dijo a La Nación José Arata, titular de la Cámara Empresarial del Autotransporte de Cargas de Córdoba (Cedac).

La consultora Economic Trends, del economista Gastón Utrera, es la responsable del estudio que también establece la incidencia de los costos de carga en otros sectores. Por ejemplo, equivale al 7,8% del costo total del azúcar transportado desde Jujuy a Capital Federal, al 5,1% del limón traído desde Tucumán, al 3,5% de la manzana proveniente de Río Negro y al 1,5% del fideo seco trasladado desde Córdoba a la ciudad de Buenos Aires.

En el caso de la leche fresca entera en sachet, la incidencia es del 2,4% en el costo total del producto transportado desde Sunchales hasta la Capital Federal.

Las estadísticas marcan que, después de una caída del 24,4% del costo en dólares por kilómetro entre diciembre de 2015 y marzo de este año, por efecto de la devaluación, se registró un alza de 1,7%, lo que deja el valor a 1,37 dólares.

Utrera señaló que este tipo de análisis permite ver la importancia de desarrollar transporte multimodal. Es alta la incidencia en el precio final del azúcar, por la gran distancia y el bajo precio del producto. En cambio, sería menor por un sistema multimodal porque facilitaría que los transportistas de carga por camión trasladen todos sus costos al precio del servicio, "con lo cual podrían mejorar todas las partes, incluyendo el propio empresario".

Carlos Musante, director técnico de la Cámara Empresaria de Operadores Logístico (Cedol), también participó de la jornada y planteó que la inflación de costos de este año está por encima de la de los últimos seis. Recordó que los combustibles acumulan una suba del 40% y que la mano de obra se incrementó en igual porcentaje. A eso se le suma una carga impositiva de entre 35 y 40 por ciento.

"Sólo con esos tres elementos se alcanza entre el 80 y el 85 por ciento de los costos de una empresa que son trasladados a precio porque no hay espacio para ajustar márgenes de rentabilidad que ya es exigua", apuntó a este diario.

A su entender, hay diferentes caminos para mejorar la productividad aunque insistió en que la mirada debe ser integral. Mencionó, entre otros aspectos, el arreglo de rutas, ferrovías y puertos a la construcción de centros de distribución eficientes y a la incorporación del bitren. Sobre ese punto, insistió en que "está la resolución pero no la reglamentación".

También señaló que por el costo de estas unidades, que constan de un vehículo de carga conformado por una unidad tractora (camión) que transporta a dos semirremolques que se articulan entre sí mediante un sistema de enganche tipo "V", los transportistas requerirán de financiamiento a bajo costo de bancos oficiales para renovar la flota. Un bitren ronda los 400.000 dólares.

Arata cree que la reducción de la carga impositiva es clave para descomprimir el sistema. "Es enorme en todas las jurisdicciones", dijo y como ejemplo apuntó que en Córdoba hay una doble imposición para los vehículos, la provincial y la municipal.