SAN PABLO (Reuters).- La siembra de soja de la campaña 2016/2017 en Brasil avanzó al 21 del actual sobre el 29,8% del área proyectada, un nivel que en años anteriores recién se alcanzó durante la primera quincena de noviembre, según informó ayer la delegación local de la consultora estadounidense INTL FCStone.

El adelanto de la siembra se debe a un clima favorable, que permitió a los productores anticipar las labores, después de la incertidumbre planteada desde septiembre en cuanto a la posibilidad de lluvias escasas. A principios del presente mes, la consultora proyectó el volumen de la cosecha brasileña de soja en 101,83 millones de toneladas

Además, INTL FCStone advirtió que el alto precio del maíz en el mercado doméstico implica un incentivo para los productores a ampliar el área destinada al cereal en la segunda cosecha. "En ese sentido, el primer objetivo de gran parte de los productores de granos en el ciclo 2016

2017 pasa por anticipar lo máximo posible la siembra de soja, para poder ampliar la superficie destinada a la safrinha de maíz", afirmó el director de Inteligencia de Mercado de la consultora, Thadeu Silva.

En el estado de Mato Grosso, la siembra de soja progresó sobre el 42,27% del área proyectada, según la información aportada por el Instituto Mato Grossense de Economía Agropecuaria y citada por el trabajo de INTL FCStone como un nivel de adelanto "inédito". Silva explicó que en los años anteriores, ese nivel de siembra "fue alcanzado de dos a cuatro semanas más tarde, según la región dentro del Estado".

En la mayoría de las regiones de Mato Grosso, lo ideal es que la siembra de maíz se haga a mediados de febrero. "Considerando un ciclo de 120 días para la soja, la siembra del cereal en el momento óptimo sólo será posible si la soja se siembra hasta la primera semana de noviembre, algo que se logrará, teniendo en cuenta el nivel actual del progreso de la siembra", dijo Silva.