Es así que la lluvia “reanimó el espíritu en el campo”, y si bien los niveles de agua fueron dispares y localizados, una parte importante de los suelos fueron regados, permitiendo el buen desarrollo de los cultivos.

Respecto a las zonas de mayor precipitación, el informe devela que se reportaron importantes lluvias, principalmente en la zona sur de la región Oriental, pero menos intensas y más aisladas en la zona norte, mientras que en algunas zonas, el viento hasta derribó las plantas de maíz.

Escenario disparejo

La UGP recopiló algunas experiencias, como del productor y representante de la Coordinadora Agrícola del Paraguay, Marcio de Souza, del nordeste de Itapúa, quien confirmó que tuvieron abundante lluvia y los cultivos se están desarrollando bastante bien, tanto para el maíz y soja zafriña, como el sorgo y los abonos verdes.

Mencionó que algunas parcelas de maíz ya están entrando en etapa de floración, y la soja, en su mayoría, está en estado vegetativo, y algunas tempraneras en llenado de granos. Hacia el norte de San Pedro también registraron distintos niveles de lluvias por zona. Mientras que en áreas de Canindeyú sigue faltando agua, y las plantas de maíz en floración y soja zafriña están siendo afectadas.

La falta de lluvias continuadas desafía a los productores de esta última zona y aumenta la incertidumbre, ya que el pronóstico es poco alentador con relación a la cantidad de lluvia para las próximas semanas. Como una apreciación respecto al panorama, el boletín señala que al mencionado escenario se suma la tendencia a la baja de los precios para las principales commodities, que merma los ingresos para el productor.