La semana pasada fue negra.

La soja bajó algo más de 3% en el mercado internacional.

Para colmo, este lunes la caída continuó. Fue una dura jornada en Chicago.

Las bajas se dieron así: marzo USD 3,95 y mayo USD 3,49.

Las condiciones climáticas, en Sudamérica, cada vez mejores, muy especialmente en el caso de la Argentina, siguen presionando a la baja de los valores.

Las recientes precipitaciones auguran una excelente cosecha.

Además, los pronósticos para Brasil alientan una visión más positiva en términos de rindes.

De acuerdo a las Administración Oceánica y Atmosférica de EE.UU. un gran volumen de precipitaciones se focalizará, entre el 8 y el 16 de enero, en Mato Grosso, Minas Gerais, Bahía, Goiás y Tocantins.

Y la tendencia según esta Administración será de más lluvias para todo el país en general.

En la misma posición está el USDA, que proyecta la ocurrencia de muchas precipitaciones, en todo Brasil durante enero.

Veremos qué nos dice la Conab, este miércoles, así como el USDA, este viernes, en cuanto al volumen estimado de cosecha para Brasil.

Antes de terminar, y con el afán de destacar alguna buena, merece unas líneas el porvenir de la tasa de interés en EE.UU. pues es un elemento clave en el precio de los granos.

El mercado no debate si las tasas seguirán en suba. Los operadores están convencidos que a partir de ahora irán bajando.

Estiman que bajarán al 4% a diciembre de este año. En tanto, la Reserva Federal apunta a un recorte de 75 pb hasta 4,75% desde el actual 5,50%.

Así estamos… como dice el Profesor de Pablo: “ánimo”