La falta de agua recorta 5,5 Mt de producción en soja, que queda en 46,5 Mt, y 4,9 Mt de la de maíz, que queda en 35 millones, frente a las cifras estimadas el 10 de enero.

Se estiman 5,5 millones menos de producción de soja que lo previsto en el informe de enero y también 440 mil ha menos de superficie sem-brada y pérdidas de hectareaje por más de 700 mil ha. Comprometida por la falta de agua, el calor y el viento seco, el cultivo de soja en buena parte de la región pampeana se adentra en el llenado de granos en las peores condiciones de los últimos 10 años.

Lo anterior deja la cifra de producción de soja en 46,5 millones de to-neladas. Las 18,5 M ha cubiertas con soja, estimadas hace más de un mes, fueron ajustadas a 18,0 M ha. A ese número se le restan 716 mil ha en concepto de pérdida de superficie, que se ha cobrado el estrés térmico. Las estimaciones de rindes muestran cifras que evidencian los serios problemas productivos. En Entre Ríos, la soja se alzaría apenas con 20 quintales de promedio provincial. En Buenos Aires, el rinde pro-media 26,6 qq/ha, casi 5 quintales menos que el año pasado. Córdoba le sigue con una marca de 27,2 quintales y Santa Fe encabeza las me-jores expectativas relativas con 30,6 qq/ha. A nivel nacional, el rinde promedio está muy lejos de los casi 32 qq/ha del ciclo pasado. La pro-ducción unitaria nacional está estimada en 26,8 quintales.

En el cultivo de maíz, se destaca la caída en la productividad unitaria nacional, que se estima en 64,4 qq/ha, esto es 9,1 quintales por debajo de la cifra del informe de enero. Sin ajuste en las cifras de superficie, esto significa una producción nacional estimada en 35 millones de to-neladas.
El mayor ajuste de rinde respecto a la estimación de hace un mes se hizo en la principal provincia productora del maíz, Córdoba. La caída respecto a lo que se esperaba en enero es de 13,3 qq/ha, por lo que ahora se estima allí un rinde de 68,3 qq/ha. Buenos Aires le sigue con un recorte de 9,4 qq/ha, su rinde actual caería a los 65,5 qq/ha. Santa Fe tambien desciende 8,7 quintales. Su producción unitaria sin em-bargo sería de las más altas, con 75,6 qq/ha.