La fecha óptima para la siembra del girasol en la Argentina tiene una gran dispersión. Comienza en el NEA, en Julio-Agosto, continúa por La Pampa y centro oeste de Buenos Aires, durante septiembre y octubre, para finalizar en el Sudeste y Sudoeste de Buenos Aires entre octubre y noviembre.

Según el Ing. Agr. Facundo Quiroz, investigador del Grupo de Trabajo Girasol del Área de Investigación en Agronomía de la Unidad Integrada Balcarce (INTA-FCA), esta distribución de fechas permite anticiparse a los problemas sanitarios que pueden ocurrir en nuestra zona. Tomando en cuenta esto, se tiene información que en la zona norte hubo algunos problemas sanitarios, principalmente epidemias de Mildiu o Enanismo del Girasol.

“Se han identificado varios lotes problemas, principalmente asociados con fecha de siembras tempranas, bajas temperaturas, lotes con poca rotación, donde el girasol predomina, zonas bajas y siembras directas” comentó Quiroz, y continuó “esto hizo que el cultivo quede expuesto al patógeno Plasmopara halstedii y, agravando el problema, el cura semilla más utilizado para esta enfermedad no llega a proteger a la plántula eficientemente. Esto debido a que las condiciones de cultivo son muy favorables para el desarrollo de la enfermedad y, como resultado, se han registrado pérdidas completa de lotes de girasol”.

El profesional comenta que dado que en nuestra zona se avecina la siembra, esta información permite anticiparse y tomar medidas preventivas para que no ocurran epidemias. Ante esto recomienda tratar de evitar la siembra de materiales susceptibles, que no son resistentes a la raza de “los 700”, las cuales están mayormente difundidas en nuestra región. “No sembrar en fechas tempranas, en suelos pesados, donde la rotación de girasol es recurrente, y bajo siembra directa. Debido a que las bajas temperaturas y alta humedad del suelo son condiciones predisponentes para la ocurrencia del Mildiu” apunta el profesional.

En este sentido Quiroz agregó que “la idea es posicionar este tipo de materiales, susceptibles, y este tipo de tecnologías en fechas más tardías, en lotes más altos o mejor drenados. Buscar temperaturas de suelo que superen los 14,5ºC, para que la emergencia sea rápida y la exposición a las infecciones tempranas sea menor”.

El investigador explicó que si se debe realizar la siembra de girasol en forma temprana y/o en suelos pesados y siembra directa, se use material resistente al patógeno, y concluyó enfatizando “para estas circunstancias no se debe pensar en el uso de materiales susceptible y el curasemilla Dynasty como herramienta de protección”.