Pese a las subas registradas ayer, la soja completó en la Bolsa de Chicago la cuarta semana bajista consecutiva. La fuerte competencia de la mercadería brasileña en el mercado de exportación y el inicio sin sobresaltos del ciclo 2017/2018 en el Medio Oeste estadounidense fueron dos de los fundamentos que le dieron continuidad a la tendencia bajista de las cotizaciones, que durante el segmento tocaron el nivel más bajo desde abril de 2016.

Tras el cierre de las operaciones, las pizarras mostraron ayer alzas de US$ 3,30 y de 2,94 sobre los contratos julio y agosto de la soja, cuyos ajustes resultaron de 338,50 y de 339,24 dólares por tonelada. En el balance de la semana, estas posiciones resignaron un 0,57 y un 0,67% frente a los valores vigentes el viernes anterior, de 340,43 y de 341,54 dólares. Pero en lo que va de la extendida tendencia bajista, los quebrantos son del 5,62 y del 5,47%, respecto de los 357,52 y de los US$ 357,79 del viernes 5 del mes pasado.

La soja completó la cuarta semana consecutiva bajista en la Bolsa de Chicago
La soja completó la cuarta semana consecutiva bajista en la Bolsa de Chicago. Foto: Archivo / MARIO GARCIA

Para la posición noviembre, que marca el ingreso en el circuito comercial de la soja estadounidense 2017/2018, el cierre ayer dejó una suba de US$ 2,66 y un valor de US$ 339,88 por tonelada. La caída semanal resultó del 0,46% frente a los 341,44 dólares del viernes precedente, mientras que la merma acumulada en los últimos cuatro segmentos es del 4,29%, desde los 355,13 dólares del 5 de mayo.

Las subas registradas ayer estuvieron relacionadas con compras de oportunidad de los fondos de inversión (durante la rueda adquirieron unos 5000 contratos, equivalentes a poco más de 680.000 toneladas), que se encuentran sobrevendidos, y a la devaluación del dólar frente al euro, que llevó la paridad de 1,1214 a 1,1276 (en la semana la moneda estadounidense cayó un 1 por ciento).

También aportó al movimiento alcista la especulación de los operadores con las eventuales consecuencias sobre los cultivos de la falta de humedad que se comienza a advertir en el norte de las Grandes Planicies y sobre el noroeste de Minnesota. Sin embargo, esto tiene más que ver con un "deseo alcista" del mercado que con un hecho concreto, cuando el 95,09% del Medio Oeste de los Estados Unidos aparece sin restricciones hídricas en el mapa de monitoreo de la sequía del Centro Nacional de Mitigación de la Sequía al 30 del mes pasado.

Entre los fundamentos de presión bajista de la semana se volvió a destacar Brasil, que durante mayo exportó 10.959.858 toneladas de poroto de soja, por encima de las 9.915.098 toneladas embarcadas un año atrás. A ese dato su sumó la previsión de una intención de siembra 2017/2018 con un alza de hasta un 3% y, ayer, dos nuevas estimaciones que elevaron aún más el volumen de la cosecha 2016/2017 (como se amplía por separado).

Los lamentos de los procesadores de soja de China, que ya desde la semana anterior vienen advirtiendo que sus márgenes son negativos, también conspiraron contra la recuperación de los precios de la oleaginosa porque mantuvieron latente la posibilidad de cancelaciones de negocios.

En el mercado doméstico de granos la soja se mantuvo firme, dado que las fábricas volvieron a ofrecer $ 3900 por tonelada disponible para las terminales del Gran Rosario, sin cambios. Tampoco hubo variantes para Bahía Blanca y para Necochea, donde la demanda propuso 3700 pesos.

Ayer, según el Monitor SioGranos, del Ministerio de Agroindustria de la Nación, hasta las 20 se habían comercializado 31.678 toneladas de soja en el nivel país, muy por debajo de las 270.184 toneladas reportadas por el sistema el viernes anterior.

En el Mercado a Término de Buenos Aires (Matba), las posiciones julio y noviembre de la soja sumaron US$ 3,40 y 2, mientras que sus ajustes fueron de 248,10 y de 253,30 dólares.

Maíz y trigo

Los contratos julio y septiembre del maíz en Chicago subieron ayer US$ 0,88 y cerraron con ajustes de 146,74 y de 149,89 dólares por tonelada. En el balance semanal, estas posiciones resignaron un 0,40 y un 0,27% frente a los valores del viernes anterior, de US$ 147,33 y de 150,29.

En la plaza local, la exportación ofreció $ 2450 por maíz para Bahía Blanca, $ 50 más que anteayer. Desde ese puerto se prevén embarques por 332.286 toneladas en el período 31 de mayo/26 de junio, según informó la Bolsa de Comercio de Rosario en su reporte sobre carga de buques.

Para el Gran Rosario, desde donde deben embarcarse en el segmento antes citado 1.194.497 toneladas, el maíz se mantuvo estable, en $ 2350 por tonelada. Con despachos previstos en apenas 7500 t, el valor del cereal en Necochea bajó de 2350 a 2300 pesos.

En el Matba, las posiciones julio y septiembre del maíz sumaron US$ 1,30 y 0,60, en tanto que sus ajustes fueron de 142,80 y de 144,50 dólares.

Acerca del trigo argentino, la exportación volvió a ofrecer $ 2550 para Necochea y $ 2600 para el Gran Rosario y para Bahía Blanca, aunque en operaciones muy puntuales se llegó a pagar $ 2650. El trigo nuevo osciló de 155 a 160 dólares por tonelada.