Tras dos jornadas con fuertes subas para el poroto de soja y para el aceite en la Bolsa de Chicago, por la especulación en torno de cambios en la política oficial estadounidense sobre los agrocombustibles, ayer los operadores volvieron a focalizar su atención sobre América del Sur. En esta región, la cosecha de la oleaginosa evoluciona mejor de lo previsto, con las exportaciones de Brasil favorecidas por la devaluación del real frente al dólar y con la producción de la Argentina mucho más cerca de los 55 que de los 50 millones de toneladas que se llegaron a calcular en plena crisis climática.

Al momento de fijar los ajustes, las pizarras reflejaron bajas de US$ 5,33 sobre los contratos marzo y mayo de la soja, cuyos precios fueron de 377,27 y de 381,13 dólares por tonelada. En el caso del aceite, las posiciones marzo y mayo perdieron US$ 13,45 y quedaron con valores de 746,92 y de 752,43 dólares.

Ayer, la Secretaría de Comercio Exterior de Brasil informó que las exportaciones brasileñas de soja resultaron récord en febrero, con 3,51 millones de toneladas, un volumen que quedó cuatro veces por encima de lo embarcado en enero y un 72% por encima de igual mes de 2016. El organismo añadió que el acumulado en 2017, de 4,40 millones de toneladas, "es el más elevado desde que lleva registros de las ventas externas de soja, en 2006".

El adelanto en las tareas de cosecha y la devaluación del real frente al dólar (se reactivó en los últimos días) fueron los factores que contribuyeron con la fluidez de las exportaciones brasileñas que, sin embargo, podrían haber resultado mayores de no mediar complicaciones de logística tras las excesivas lluvias que se registraron durante la segunda mitad del mes pasado.

Cabe añadir que ayer la paridad real/dólar cerró en 3,153, un 1,3% arriba del cierre de la semana anterior, de 3,114. Los operadores consideran que de acentuarse la devaluación del real, marzo también mostrará una marca de ventas externas récord.

Por último, ayer la consultora estadounidense Informa Economics elevó de 106,50 a 108 millones de toneladas su previsión sobre la cosecha de soja de Brasil, en tanto que mantuvo en 55 millones su proyección para la Argentina.

Las bajas externas se reflejaron en el mercado doméstico, donde las fábricas ofrecieron $ 4000 por tonelada de soja disponible para el Gran Rosario, $ 100 menos que anteayer. No obstante, la Bolsa de Comercio de Rosario advirtió que por la tónica negativa en Chicago y por la apreciación del peso frente al dólar, la propuesta de los compradores quedó al cierre en $ 3900.

Sin cambio se negoció la soja de la nueva cosecha, en US$ 255 por tonelada. En el Mercado a Término de Buenos Aires, las posiciones mayo y julio perdieron US$ 5,50 y 4,60, en tanto que sus ajustes fueron de 257,50 y de 262,50 dólares.

Respecto del trigo argentino, ayer la exportación pagó $ 2600 por tonelada en Necochea y $ 2550 para Bahía Blanca, sin cambios. Para el Gran Rosario el cereal se cotizó a $ 2550, con un repunte de $ 50. La Bolsa de Cereales de Buenos Aires informó que los molinos pagaron ayer entre 2450 y 3000 pesos por tonelada de trigo, según calidad, procedencia y forma de pago.

Por maíz disponible la exportación pagó $ 2400 en el Gran Rosario, sin cambios. En Necochea, la necesidad puntual de un comprador llevó el valor de 2400 a 2650.