Mientras los reflectores seguían enfocando la figura de Donald Trump, electo ayer presidente de los Estados Unidos, el mercado de granos fue sorprendido por las nuevas cifras del informe mensual de oferta y demanda de granos publicado por el Departamento de Agricultura estadounidense (USDA, por sus siglas en inglés), en el que el organismo elevó aún más los volúmenes de las cosechas récord de maíz y de soja.

En su trabajo, el organismo elevó ayer de 382,48 a 386,75 millones de toneladas su previsión sobre el volumen de la producción estadounidense de maíz, cuando el mercado esperaba un recorte a 382,06 millones. Consecuentemente, el USDA llevó el stock final del cereal hasta los 61,05 millones, frente a los 58,94 millones del reporte del octubre; los 58,42 millones previstos por los operadores, y a los 44,14 millones remanentes de la campaña anterior.

La respuesta del mercado al informe oficial -no a la elección de Trump- fue un derrumbe del 3,9% del precio del cereal, que pasó de 139,46 a 134,15 dólares por tonelada en la Bolsa de Chicago.

En cuanto a la soja, el USDA incrementó su previsión sobre el volumen de la cosecha estadounidense 2016/2017, de 116,18 a 118,69 millones de toneladas y la dejó incluso por encima de los 117,41 millones proyectados por los operadores.

Aún más bajista resultó el dato de las existencias finales de los Estados Unidos, que fueron calculadas por el organismo en 13,08 millones de toneladas, porencima de los 10,74 millones del reporte de octubre y de los 11,43 millones estimados por el mercado en la previa del trabajo oficial. Ahora, el stock estadounidense de la oleaginosa quedó un 144% por encima del remanente dejado por el ciclo 2015/2016, de 5,36 millones.

Como agravante, el aumento de la cosecha no fue compensado por un incremento del lado demanda, dado que las importaciones de China fueron mantenidas estables, en 86 millones de toneladas. Y en este caso, la consecuencia del informe del USDA fue una baja del 2% en el valor de la soja en Chicago, donde pasó de 368,08 a 360,82 dólares por tonelada. Cabe destacar que antes de la salida del informe (las 14, hora argentina) el precio de la oleaginosa se negociaba con una mejora próxima a un dólar por tonelada.

La incertidumbre Trump

Tal fue el movimiento que generó el USDA con sus nuevas cifras, que los operadores debieron interrumpir el análisis de las elecciones y las elucubraciones en torno de la figura del presidente electo, Donald Trump. En la madrugada, y ya con la tendencia a favor del empresario, la primera reacción del mercado fue negativa para los precios de los granos, con pérdidas próximas a los cinco dólares por tonelada para el caso de la soja. Sin embargo, ese primer paso fue lógico, dado que durante la rueda del martes una importante cuota de las ganancias con que cerraron las cotizaciones de los granos estuvo relacionada con el aparente triunfo de Hillary Clinton.

Entre los operadores -y entre los productores argentinos-, la cuestión por dilucidar es qué puede pasar en el mercado bajo la gestión Trump. Y, en ese sentido, es muy posible que la incertidumbre se extienda durante las próximas horas, por la extensa serie de declaraciones controvertidas que el magnate lanzó durante la campaña. La temida posibilidad de que Trump tienda a cerrar la economía de los Estados Unidos; que suban las tasas, y que se eleve el valor del dólar frente a otras monedas relevantes para el comercio global tendría un impacto bajista sobre el valor de las materias primas agrícolas, en buena medida por la pérdida de competitividad de las propias mercaderías exportables estadounidenses.

Sin embargo, si en algo se destacó el ahora electo presidente fue en los negocios, entonces, ¿se pueden esperar políticas comerciales que dañen los negocios de los productores estadounidenses? Difícil. Más bien, se puede esperar una política que torne más competitivas sus exportaciones (dólar bajo), justo en una campaña agrícola que por estos días está dejando un volumen de granos gruesos inédito, superior a los 505 mill./t. Como dato a tener en cuenta, a excepción de las áreas urbanas de Illinois y de Minnesota, el resto de los Estados que conforman el cordón maicero/sojero del Medio Oeste votó por Trump, al igual que los Estados de las Grandes Planicies trigueras.

En rigor, la cosecha estadounidense continúa siendo récord, con Trump presidente o sin él. Los vendedores de EE.UU. siguen necesitando la demanda china de soja y las compras mexicanas de maíz, con muro o sin muro, y continúan dependiendo de la competitividad para lograr colocar trigo en el norte de África y en Medio Oriente, frente a la avidez exportadora de Rusia y de Ucrania, por lo que difícilmente el cambio de mandatario modifique la lógica actual del mercado.

Cosechas inéditas en Estados Unidos

386,75

Son los millones de toneladas de maíz

En su informe mensual, el USDA estimó un récord de 386,75 millones de toneladas, que superó los 382,48 millones del informe anterior y los 382,06 millones previstos por el mercado. México es el principal comprador de maíz estadounidense.

118,69

Es la cosecha de soja en millones de toneladas

Si bien el mercado esperaba un aumento de la previsión del USDA para EE.UU., los 118,69 millones de toneladas proyectados no sólo superaron los 116,18 millones de octubre, sino también los 117,41 estimados por los operadores.

-3,9%

Fue la caída del precio del maíz en Chicago

Tras el informe, el precio del maíz entró en un rally bajista y el ajuste de la posición diciembre cayó de 139,46 a 134,15 dólares por tonelada. Para la soja, el descenso fue del 2%, de 368,08 a 360,82 dólares.