El perfume y sabor de este fruto despiertan recuerdos que se asocian profundamente a sentimientos, emociones y sensaciones de muchas de nuestras familias. En particular, aquellos que somos descendientes de italianos fusionamos invariablemente al "pomodoro" con el sol, la campiña, la familia y la cocina peninsular. Una imagen que llena los cinco sentidos. Sin embargo, Italia apenas representa un 3% de la producción global.

China es el líder mundial con una producción superior a 50 millones de toneladas y Cofco, su empresa bandera en granos y alimentos, se ha convertido en el procesador líder de tomates del mundo con más de veinte plantas industriales y con una calidad tal que le ha permitido proveer a clientes internacionales tan importantes como Heinz.

De esta manera, este gigante agroindustrial no solo está creciendo en el negocio de granos con las adquisiciones de Nidera y Noble, sino que incursiona y se expande en otros segmentos de valor agregado. Así que cuando consumamos ketchup u otra forma de tomate procesado muy probablemente estemos consumiendo "pomodoros chinos".

Los cinco principales productores son China, India, Estados Unidos, Turquía y Egipto concentrando alrededor del 60% de la producción mundial. Por su parte, México no solo es el principal exportador de tomate fresco según estadísticas de Comtrade-ONU, sino también uno de los dueños de su origen.

El consumo de tomates en sus distintas formas ha crecido en promedio a tasas de dos dígitos en los últimos 15 años. Sin embargo, el consumo per cápita en países emergentes es inferior a un cuarto de aquellos registrados en países desarrollados con 23 kilos por habitante. Aun hay mucho por conquistar para el perfume, sabor y versatilidad del producto.